Nacido en el municipio de Xocchel, desde muy joven Buenaventura Couoh Chim tuvo la oportunidad de aprender a través de un familiar los secretos en la preparación de los mariscos y de otros platillos yucatecos.
“Desde la infancia me llamaban El Negro y así me conocen desde que llegué a Mérida hace casi 50 años. Tenía 14 años cuando comencé a trabajar con un tío que se dedicaba a la venta de tacos de marisco; él trabajaba con una persona a la que le decían Don Tax, que en ese entonces tenía su puesto en los bajos del Olimpo, donde había un bar que se llamaba El Siboney”, recordó el hombre.
Durante mucho tiempo, laboró en el ya desapacido restaurante “El Cangrejito”, que se ubicaba en la calle 62, donde se hizo de muchos clientes, que a la fecha siguen degustando sus sabrosos tacos de camarón, pulpo y cherna, así como de pavo y chicharrón con huevo, y que en la actualidad acuden a su taquería llamada “El Negro”, que se ubica sobre la 64, a una cuadra de la Plaza Grande, y que atiende acompañado del buen amigo Manuel May.
Pasar a comer al local de don Buenaventura es algo muy especial, ya que para empezar, el trato que tiene con su clientela es muy ameno, de tal modo que a lo largo del día acude mucha gente que en su infancia visitaba el lugar acompañado de sus padres o abuelos, pero también es el punto de encuentro para recordar lo que ocurría en Mérida en tiempos pasados, y escucharlo de viva voz de sus protagonistas, así como para comentar los temas de actualidad, y qué mejor que hacerlo acompañado de unos tacos o tortas de camarón empanizado o bacalao a la vizcaína, que es la especialidad de la casa.
En este sentido, recuerda que el pasado 16 de septiembre se ha vuelto una costumbre para muchos funcionarios públicos que al término del desfile acudan a desayunar y recargar sus pilas con los taquitos de marisco que prepara, pero también le hacen encargos especiales como la preparación de pavos en relleno negro o escabeche, como el que al momento de la visita del equipo de Peninsular Punto Medio recién había terminado, y que en unos momentos entregaría a su cliente.
Orgulloso don Buenaventura comenta que su oficio le ha dejado muchas satisfacciones y la oportunidad de servir a numerosos artistas, empresarios y personajes de la vida política, que cuando tienen algún festejo o evento especial, no dudan en pedirle que él se encargue del menú y que vaya personalmente a preparar y servir sus tacos y tortas a los invitados.
Esta no es una situación nueva, ya que durante años él era el encargado de la comida que se repartía en la firma de los contratos de boxeadores que participarían en las funciones que don William Abraham organizaba en el Carta Clara y luego en el Poliforum Zamná.
Don Buenaventura también recuerda que en su momento atendió a muchos pilotos de la compañía Mexicana de Aviación, y grande fue su sorpresa cuando hace unos años llegaron hasta su local a entrevistarlo, y resultó que el reportaje se publicó en la revista que la mencionada aerolínea obsequiaba a los pasajeros a bordo de los aviones.“Un año estuvo circulando esa revista en los aviones, y cuando los viajeros que la leyeron venían a Mérida, buscaban el local para comer con nosotros, entonces esa es una de mis más grandes satisfacciones”, apuntó.
Datos a destacar
– La Taquería El Negro, establecimiento que pronto cumplirá 33 años de existencia, se encuentra ubicado en la calle 64 entre 59 y 61, en pleno centro de la ciudad y abre sus puertas desde las 7 de la mañana y las cierra hasta las 3 de la tarde.
– Don Buenaventura Couoh Chim es originario del municipio de Xocchel y desde la infancia lo llaman “El Negro”, apodo con el que llegó a Mérida hace casi 50 años; tenía 14 años cuando comenzó a trabajar con un tío que se dedicaba a la venta de tacos de marisco en un puesto que tenía en los bajos del Olimpo.
Texto y fotos: Manuel Pool