Más de un 70 por ciento de la población mundial no tiene acceso a agua gestionada de forma segura y un 10% sigue sin tener acceso básico a agua potable
Tres de cada cuatro habitantes del mundo viven en países con algún nivel de inseguridad hídrica, según un informe presentado este jueves por expertos de Naciones Unidas, que advierte que la comunidad internacional está muy lejos de alcanzar las metas que se ha fijado en este ámbito.
El análisis, elaborado por el Instituto para el Agua, Medio Ambiente y Salud de la Universidad de la ONU, examina toda una serie de factores como el acceso a agua potable, saneamiento, salud, calidad del agua, disponibilidad o estabilidad del suministro para evaluar la situación de cada país.
En un extremo, 23 países tienen niveles críticos de inseguridad hídrica (entre ellos Eritrea, Sudán, Etiopía, Afganistán, Haití, Pakistán y Yemen), mientras que en el otro únicamente 33 cuentan con una situación adecuada, principalmente estados de Europa y algunos sueltos en otras regiones como Canadá y Estados Unidos, Japón, Israel, Nueva Zelanda o Australia.
Entre medias, una mayoría del mundo sufre inseguridad hídrica, aunque no en sus niveles más extremos, explicaron los autores del informe en una conferencia de prensa.
Los expertos recalcan que la abundancia de agua en un país no equivale necesariamente a seguridad hídrica y pone el ejemplo de muchos países de África, Asia o América Latina con mucha agua, pero que tienen malas calidades o poco acceso a saneamiento.
Uno de los principales problemas que identifica el informe es que más de un 70 por ciento de la población mundial no tiene acceso a agua gestionada de forma segura y un 10% sigue sin tener acceso básico a agua potable.
Acabar con esa situación, precisamente, era una de las grandes metas incluidas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible pactados por la comunidad internacional en 2015 con vistas a 2030.
“Sin seguridad hídrica los países son simplemente incapaces de apoyar ecosistemas de agua dulce, sustentos y bienestar humano”, señaló en un comunicado Charlotte MacAlister, la autora principal del documento.
El informe se presentó en el marco de la Conferencia del Agua de la ONU, la primera cita de este tipo en casi 50 años y en la que se buscan compromisos de países y empresas para actuar ante la crisis del agua que se vive a nivel global.
Texto y foto: EFE / Agencias