A Silvana, Marcelo y Tatiana Flores no sólo los une la sangre y el gusto por el fútbol, sino también el Arsenal de Inglaterra, donde desde el lunes pasado los tres forman parte de sus equipos juveniles.
La historia de estos hermanos es multinacional y de genética futbolera, pues el padre es Rubén Flores, quien jugó para Atlante y Cruz Azul y luego entrenó a la Selección Femenil de Islas Caimán, mientras que su madre, también exfutbolista, es de Canadá.
“Mi mujer es canadiense y también jugó fútbol en Canadá, nos conocemos, nos casamos, tenemos los tres hijos, los tres nacidos en Canadá. Mi esposa siendo canadiense tiene descendencia inglesa y conseguimos papeles para vivir en Inglaterra y criar a mis hijos”, contó Rubén.
Fue en 2016 cuando llegaron a Ipswich, donde Marcelo fue invitado a jugar para la cantera del Ipswich Town, donde Giovani dos Santos jugó en 2009, luego de que lo vieron en un campamento en Islas Caimán. Todo ello mientras Silvana ya era seleccionada mexicana Sub-17 y militaba en el Essex.
Pero pronto se mudaron a Londres, donde los Gunners ficharon a Silvana, la mayor de 17 años, así como a Tatiana, de 14. Marcelo, de 15, estaba en la mira desde hace medio año pero apenas esta semana formalizaron su fichaje mediante una compra.
“Ipswich Town hizo un campamento y uno de los entrenadores lo invitó cuando tenía 9 o 10 años. Cuando llegamos acá fuimos a visitar al equipo y nos dijeron que sí y comenzó a entrenar en la academia por dos años, le fue muy bien y este año el Arsenal lo vio y lo compraron al Ipswich Town”, relató Flores.
“Mis hijas jugaban en el fútbol femenil de Inglaterra, en centros de entrenamiento de alto rendimiento. Las dos se fueron a probar al Arsenal y a las dos les dieron contrato, a Marcelo lo compra el Arsenal y ahora estamos con los tres acá”.
Texto y foto: Agencias