Un abono que podría no ser tan difícil de conseguir y que hasta resulta económico

Un abono que podrías utilizar para tus plantas y hortalizas es el estiércol, que puede no ser tan difícil de conseguir, pero con varias recomendaciones a seguir puedes reducir el mal olor y que atraiga moscas.

Si recoges el estiércol de tus propios animales, o los de un vecino, es mucho más rentable que comprar abono comercial o fertilizante inorgánico. También reduce drásticamente el precio en comparación con la producción y el transporte del abono comercial.

Otro inconveniente del estiércol fresco es que tiene un olor más fuerte y, por tanto, atrae a las moscas. También puede contener patógenos y semillas de plantas que no quieres que crezcan en tu jardín. Para solucionar estos problemas, deja que el estiércol se descomponga durante 1-6 meses.

Te conviene utilizar el método de compostaje en caliente, ya que las altas temperaturas ayudarán a matar huevos de mosca, patógenos y semillas de algas, además de reducir los olores.

El estiércol es un abono orgánico elaborado a partir del estiércol del ganado doméstico, incluidos los caballos, las vacas y las aves de corral. También puede contener orina y material de cama como paja o aserrín.

Es un recurso valioso para el medio ambiente, porque contiene nutrientes como nitrógeno, fósforo y potasio. Estos nutrientes ayudan a potenciar el crecimiento de las plantas y verduras en las granjas y en tu jardín casero. Además, de añadir nutrientes al suelo, la materia orgánica del estiércol ayuda a la tierra a retener la humedad, permite un mejor intercambio gaseoso y añade microbios beneficiosos.

El contenido orgánico del estiércol también puede utilizarse para producir energía renovable, lo que tiene la ventaja añadida de evitar la liberación a la atmósfera del gas de efecto invernadero.

 

 

 

CONSEJO DE TREHUGGER

Usar el estiércol en tu jardín para mejorar la calidad del suelo es una opción mucho más respetuosa con el medio ambiente que utilizar abonos inorgánicos o químicos, que se elaboran mediante un proceso extremadamente intensivo en energía. Sin embargo, antes de aplicar el estiércol a tus plantas, hay que prepararlo de forma adecuada.

El estiércol se elabora a partir de los “lodos” o heces fecales de los animales. También puede contener material de cama como paja, aserrín y orina. Los tipos más comunes de estiércol que se encuentran para su uso en los jardines como abono proceden de vacas, caballos y aves de corral.

El estiércol contiene cinco componentes principales, todos los cuales tienen aplicaciones útiles en una serie de industrias.

-Nutrientes. Principalmente nitrógeno, fósforo y potasio. Pueden utilizarse en la composta o en el abono para mejorar la calidad del suelo. Estos nutrientes también pueden ser convertidos mediante procesos de biomasa en enmiendas para el suelo y alimento para animales.

-Materia orgánica. Estos compuestos que contienen carbono ayudan a mejorar la estructura del suelo y su capacidad para retener el agua. Añadir carbono del estiércol al suelo también puede ayudar a reducir el carbono atmosférico. El suelo con un mayor porcentaje de materia orgánica ayuda a mejorar el rendimiento de los cultivos y también es más resistente a la erosión, tanto del viento como del agua. La materia orgánica también aumentó el intercambio gaseoso y añadió microbios beneficiosos al suelo.

-Sólidos. El estiércol fresco tiene un alto contenido en agua y, una vez eliminado, la parte sólida del estiércol puede reutilizarse como material de cama para los animales de la granja.

-Energía. La energía del estiércol puede utilizarse para generar biogás, biocombustibles y syngas.

-Fibra. Tanto de los alimentos no digeridos como de los materiales de la cama. La fibra del estiércol puede utilizarse para crear productos como macetas para semillas y materiales de construcción.

Se trata de un producto que se puede utilizar para crear productos como macetas para semillas y materiales de construcción.

Históricamente, el estiércol ha sido un recurso valioso para los agricultores y pequeños propietarios, aunque a nivel industrial parece haber caído en desgracia frente a los fertilizantes inorgánicos. Según el Usda, sólo el 5% de las tierras de cultivo de Estados Unidos se abona con estiércol.

 

 

 

TEXTO Y FOTO: CORTESÍA