Mucha música y gratas emociones enmarcan una espectacular celebración de Independencia, la última que desde el balcón del Palacio de Gobierno encabezó Rolando Zapata Bello
Desde temprana hora, miles de yucatecos, además del turismo nacional y extranjero comenzaron a ingresar por alguno de los siete filtros de revisión en los que los elementos policíacos tanto de la Policia Municipal de Mérida (PMM)como de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) pusieron especial atención para examinar por separado a mujeres y varones.
La instrucción que se cumplió con éxito fue detectar cualquier objeto punzocortante o algún otro que pudiera utilizarse como arma.
En la revisión se retuvieron numerosos cinturones, desodorantes y fijadores en spray, además de lociones con atomizador. La ciudadanía atendió al llamado y, finalmente, el tradicional Grito de Independencia transcurrió en completa calma.
“Apúrate ya está tocando la Santanera”, le dijo una mujer a su esposo, mientras trataban de llegar a uno de los accesos.
En efecto se trataba de la prestigiada agrupación fundada por Carlos Colorado en la década de los sesentas, ahora con la voz de María Fernanda la ex Académica, que en sus pruebas de sonido interpretaron dos temas con los que dieron muestra de su gran calidad musical.
En los alrededores del Palacio se arremolinaron miles de personas que buscaban tener la mejor vista del escenario principal, donde previo a la ceremonia del Grito se presentó la Sonora Dinamita.
La agrupación colombiana hizo amena la espera interpretando temas clásicos como “La Cadenita” y “No te metas con mi cucú”, con las que llegó a su fin la presentación.
Eran escasos minutos antes de las once de la noche y se dejaron escuchar los toques marciales que anunciaban el inicio de la ceremonia solemne,en la que después de los honores al Lábaro Patrio, tomó la palabra la secretaria general de Gobierno, Martha Góngora Sánchez, quien dio lectura al acta de Independencia.
Ya no cabía nadie frente al Palacio de Gobierno, que por cierto cumplió anoche 126 años de edificado y, en medio de la expectación, una mamá se esmeraba porque su niño identificara al gobernador, “allá está, es el de blanco”, le decía.
El Himno Nacional Mexicano se escuchó y los yucatecos acompañaron con fervor patrio al Gobernador, Rolando Zapata Bello, que de esta manera encabezó la solemne ceremonia por última ocasión en su sexenio que propiamente está a dos semanas de concluir.
El gobernador pronunció la tradicional fórmula para recordar a los héroes que nos dieron patria, como Hidalgo y Aldama para luego pronunciar el esperado “¡Viva México!”.
Los aplausos surgieron de manera espontánea y los elementos de la guardia interpretaron despidieron a la bandera con los honores correspondientes.
Los gritos de euforia se combinaban con el sonido de las trompetas de plástico que se utilizan en los partidos de fútbol, los que aumentaron cuando después de una breve pausa desde la parte posterior de la Casa de Montejo o de un predio contiguo comenzó el esperado espectáculo de pirotecnia.
El cielo se iluminó durante más de cuatro minutos y decenas de celulares captaban el momento, mientras los pequeñines quedaban unos asombrados y otros asustados al presenciar el colorido espectacular combinado con el sonido estruendoso.
Después de agradecer al público, el maestro de ceremonias invitó al público a disfrutar la actuación del grupo Matute que con su rock de los ochentas, hicieron pasar un buen momento a las más de 15 mil almas que abarrotaron el primer cuadro de la ciudad.
Y mientras unos llegaban para ver a la Sonora Santanera, otros buscaban salir para abordar su transporte, para llegar de esa manera al fin de una noche muy especial e inolvidable.
Texto: Manuel Pool
Fotos: Juliana Sepúlveda
