El inicio del Clausura 2019 para los Venados era un poco incierto: nueva directa, nueva dirección técnica y casi medio equipo se iba a incorporar a las filas de la institución en esta campaña. Y, de hecho, el inicio fue todo, menos alentador. Incrustados en el fondo de la tabla porcentual, los ciervos tenían que hacer una campaña casi perfecta para no descender a la Segunda División de México. O, en otras palabras, los ahora dirigidos por Sergio Orduña debían de tener como objetivo calificar a la liguilla, para que, consecuentemente, puedan salvarse del drama del descenso. Para esto, el cuerpo técnico, de la mano de Luis Miguel Salvador, directivo del equipo, reforzó varias líneas, teniendo como actores principales a Paúl Uscanga, Alfonso Tamay y Alan Murialdo para comandar el rescate del conjunto yucateco.
El primer partido parecía Venados aseguró su clasificación a la Liguilla del Clausura 2019 con un empate en la última jornada, sabiendo que ya estaba salvado desde jornadas atrás.
Vital para marcar la inercia del torneo, en especial porque era el rival directo en la porcentual, y sin embargo, se perdió 2-0 jugando con uno más durante más de 70 minutos. El equipo se notó verde, falto de ideas y con mucho trabajo por hacer.
¿A QUÉ JUEGA VENADOS?
Venados también sucumbió en su presentación en casa, al caer 2-0 ante Zacatepec, pero las sensaciones fueron buenas, en especial porque se vería la tónica sobre la que trabajaría Sergio Orduña el resto del torneo: 5-3-2, con una defensa de 3 centrales, 2 carrileros; tres mediocampista, con Aldo Polo como el arquitecto del fútbol de los astados; Alfonso Tamay y Uscanga como interiores, atacando la espalda de los defensa rivales, y adelante dos delanteros: Alan Murialdo, que con el paso del tiempo, se fue afianzando la titularidad, y Esteban Torres, que funge como un 9 y medio, un mediapunta que acompaña al ‘9’ de área. Dicho esto, hay que comentar que el cuadro yucateco, comandado por Orduña, no es precisamente un vendaval en su forma de jugar. Debido a las circunstancias que presentaba el equipo, el director técnico priorizó siempre el orden defensivo, con una tendencia al juego directo para salir de la presión y salida por banda cuando se trataba de organizar un juego posicional.
ESTADÍSTICAS DEL TORNEO
Tampoco es que los Venados tengan un fortín en el Iturralde, pues de los 6 partidos disputados al momento, ha ganado 3, empatado 1 y perdido 2, logrando 10 puntos de los 18 posibles. De hecho, esto lo ubica como lugar número 10 en la tabla por puntos en los juegos como local. Como visitantes, los astados tuvieron más o menos la misma regularidad, generando nueve puntos de los 21 posibles, producto de 2 victorias, 3 empates y 2 derrotas.
EL APOYO DE LA GENTE
Es bien sabido que el deporte más popular en Yucatán no es el mismo que en todo el país: aquí reina el béisbol, y más con un equipo como Leones, que es uno de los mejores en toda la Liga Mexicana, y que cuenta con una mejor infraestructura, además de mucho más presupuesto para traer a referentes de talla internacional. Igualmente, las condiciones de uno y otro estadio están a años luz de ser iguales. Par empezar, el Kukulcán Alamo cuenta con butacas de pies a cabeza, mientas que, por el otro, el Carlos Iturralde Rivero, aunque recientemente mejorado, sigue muy lejos de lo esperado por la afición del estado, más aún comparándolo siempre con el estadio vecino. Entonces, se puede denominar que lo anterior, combinado con la pésima situación del equipo, la asistencia de cada fin de semana sería paupérrima. Y así fue. Lo que le quedaba a los ciervos era pelear, gustar y ganar.
En la primera presentación del equipo en el mítico estadio fue de 3,944 personas, un promedio que se mantuvo durante varias jornadas consecutivas, hasta que en la penúltima, se alcanzó la asistencia de 9.325 aficionados, lo cual hace referencia a que la gente respondió al buen momento del equipo.
MÉRIDA, UNA PLAZA DE PRIMERA DIVISIÓN
Otro de los desintereses de la gente por el equipo, es que no tiene una certificación por parte de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) para ascender a la Liga MX, es decir, siempre competiría en el circuito de plata, aunque termine reinando en la final del ascenso. Ante esto, los directivos de Venados FC hicieron los deberes y entregaron los requisitos de la certificación, que da el derecho a subir a la
Liga MX. Entre esos, está que el estadio cuente con un aforo de 20 mil personas, iluminación para partidos nocturnos, cuatro vestidores y medidas de seguridad para todos los que entren al estadio. En este momento, el equipo espera la respuesta por parte de la FMF, y así, en caso de ganar el campeonato de Ascenso, subir la próxima temporada a la Liga Bancomer MX. Luis Miguel Salvador, directivo de los Venados, dijo que “de acuerdo a lo que se ha solicitado, se ha entregado todo de manera correcta, ya si después van a cambiar, seríamos ajenos a ese asunto”. En estos momentos, Mérida está cada vez más cerca de volverse una plaza de Primera División, solo faltaría que el equipo responde en la máxima exigencia del torneo: La Liguilla.
Texto: Humberto Rejón
Fotos: Cortesía