MIENTRAS QUE EL RESTO DE SU FAMILIA dormía, Emeli, una niña de 11 años, fue asesinada y violada en su propia casa, localizada en la Mixteca poblana.
El crimen fue cometido la madrugada del pasado domingo en la privada Romero Rubio, ubicada en la localidad de Tulcingo del Valle, y fue su propia madre quien encontró a su hija sin vida, cuando fue a hablarle para que se levantara. La menor presentaba abundante sangrado en su zona genital, por lo que se presume que fue violada.
Hasta ahora, con base en las declaraciones de la familia, no se tienen informes de quién pudo haber ingresado a la vivienda y cómo fue posible que la niña fuera abusada sexualmente y golpeada hasta su muerte sin que ningún integrante de la familia o vecino se hubieran percatado.
Peritos de la Fiscalía del Estado acudieron al domicilio para llevar a cabo el levantamiento del cuerpo de la niña, el cual fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) de Acatlán de Osorio para practicarle la autopsia.
Sólo este fin de semana se cometieron, además de éste, otros tres asesinatos con violencia en los cuales las víctimas fueron mujeres.
En Tehuacán, dos empleadas fueron asesinadas el sábado 13, una a balazos y la otra degollada, en el interior de una casa cercana al zócalo de esa ciudad.
Lorena Salazar, de 33 años, y Luisa Cortes, de 26, quien además estaba embarazada, fueron encontradas muertas sin que hasta ahora se tenga claro el móvil pues, aunque hay versiones de que se trató de un intento de robo, la policía no encontró faltantes en el domicilio.
Igual, otra mujer de nombre Elvia Sánchez fue asesinada a balazos cuando ocho sujetos armados ingresaron a su casa presuntamente a robar.
Los hechos se registraron la madrugada del domingo en la colonia Loma Bella de esta capital. La mujer recibió tres disparos, mientras su esposo resultó herido en el brazo.
Con estos casos ya suman seis presuntos feminicidios cometidos en Puebla durante 2018.
Texto y foto:Agencias
