Devoción a los Santos Reyes en Tizimín, una tradición que se cuece aparte

Desde el 28 de diciembre inicia la fiesta a Melchor, Gaspar y Baltazar, y el ambiente de fiesta se extiende hasta el día 14 de enero en la región

En su homilía de ayer seis de enero, el arzobispo Gustavo Rodríguez Vega afirmó que Yucatán se cuece aparte por la devoción muy fuerte que se tiene por los Tres Reyes Magos, particularmente en el santuario de Tizimín, que en estos días luce abarrotado con la presencia de miles de peregrinos que llegan desde diversas partes de la Península.

Desde el 28 de diciembre pasado inició la fiesta a Melchor, Gaspar y Baltazar, los patronos de la ciudad, cuando solemnemente son bajados de su nicho, y el ambiente de fiesta se hace presente con la vaquería más grande de la región, el día 30 de diciembre, ocasión en la que asisten alrededor de cinco mil jaraneros para disfrutar la música de las diferentes orquestas invitadas, así como para coronar a la reina de la feria, a la que inclusive se le va a buscar a su casa acompañada de la música de charanga.

En la madrugada, en medio de voladores y musica, se acostumbra ir por un ceibo, que es el árbol sagrado de los mayas, para “sembrarlo” en el centro de la plaza se toros, para que de esta manera todas las actividades transcurran sin mayores problemas.

Respecto al coso taurino, hay que destacar que es considerado un orgullo para los tizimileños, ya que se construye de manera artesanal, con madera, bejucos y huano, y de tres pisos, por lo que es considerada la más grande del sureste.

Como es costumbre, el 31 de diciembre en este lugar se lleva a cabo el tradicional “Baxal Toro”, evento con gran arraigo popular que marca el inicio los festejos taurinos, y que es muy esperado por chicos y grandes.

Para la ocasión se sueltan varios ejemplares de tipo cebú, media casta o vaquillas, para que quienes así lo decidan bajen al ruedo y jueguen con el animal burlando su acometida.

Otra tradición del pueblo tizimileño es la celebración de la llamada “Nona”, que el día 31 de diciembre pasado, en su primera noche, se llevó a cabo a cargo de la diputada de feria, Cristina Tello.

En este sentido vale la pena destacar que la feria no podría realizarse sin la participación de sus nueve diputados, que son los encargados de su organización. Este cargo se hereda de generación en generación y consiste en realizar una novena en honor a los Santos Reyes y organizar a las tres de la madrugada la ceremonia conocida como “nona”, en la que acompañados de música y voladores y bailando jarana, recorren las calles de la ciudad, incluyendo una rápida visita al coso taurino, donde también se acostumbra a celebrar la misa de año nuevo por la mañana.

Ayer 6 de enero, en la Iglesia dedicada a los Santos Reyes, se formaron largas filas de personas que esperaron hasta una hora para ingresar al Santuario, de acuerdo con cálculos del párroco, en esta fecha se contabilizan cada cuatro horas hasta 1,100 personas.

Y mientras esperaban, muchos llevaron velas y su manojo  de aromatica ruda para pasarlas por la vitrina en la que se exhiben las imágenes, a las que en muchos de los casos les llevan también los llamados “milagritos”, pequeños colgantes con la figura de un bracito, de una pierna o de alguna otra parte del cuerpo humano que está enferma, y por la que se pide la intercesión de los Santos Reyes.

La fiesta continúa durante los próximos días, hasta el día 14 cuando son subidas las imágenes de Melchor, Gaspar y Baltazar, y en el recinto ferial se exhiben los mejores ejemplares de las ganaderías de la región, sin faltar los juegos mecánicos y un amplio programa artístico, así es que si usted dispone de tiempo no dude en visitar la ciudad de Reyes, una hermosa experiencia.

Texto y fotos: Manuel Pool