El primer grupo de repatriados por la guerra en Israel llega a México

Los primeros mexicanos repatriados de Israel ya están en casa. Un avión de la Fuerza Aérea Mexicana aterrizó ayer en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles con 143 personas a bordo. Entre los connacionales hay residentes en Israel y turistas que visitaban el país cuando estalló la guerra con Hamás.

Las familias de los connacionales han esperado con nervios y mucha emoción volver a abrazar a sus seres queridos. Como Lorena González, que esperaba a su primo Axel, de vacaciones en Jerusalén desde hace una semana. “Nos cayó de sorpresa a todos. Nos enteramos por las noticias”, dijo González, que ha ido a recibirle junto a otros familiares. También al pie de la pista esperan los padres de David Sulkin, mexicano de la comunidad judía, que había ido a estudiar a Israel tras cumplir los 18 años. “Lo primero que voy a hacer es abrazarlo”, dijo su madre, Janet Shafat con lágrimas en los ojos.

El vuelo ha durado casi 20 horas y ha realizado escalas en Turquía, Irlanda, Canadá y Estados Unidos, para después llegar a la base militar de Santa Lucía, en el Estado de México, a las 19:45 de la tarde. Junto a este primer avión se espera la llegada de otra aeronave con otros 133 pasajeros que aterrizará la misma noche y que ha realizado el mismo recorrido.

El operativo ha estado a cargo del General Leobardo Ávila Bojórquez, piloto aviador diplomado de Estado Mayor Aéreo. Los dos vuelos humanitarios organizados por el Gobierno mexicano salieron el martes del Aeropuerto Internacional Ben Gurión de Tel Aviv. Entre los rescatados viajan 30 niños y tres mujeres embarazadas, además del equipo nacional de gimnasia rítmica. Las atletas fueron de las primeras en solicitar el apoyo del Gobierno de México para salir del país. Los repatriados proceden de los Estados de Nayarit, Michoacán, Guerrero y Ciudad de México, entre otros. En la segunda aeronave, que despegó unas horas más tarde, con el mismo recorrido, se espera que lleguen otros 133 mexicanos, de acuerdo con la Secretaría de Relaciones Exteriores.

Texto y foto: Agencias