En los primeros meses de este año ya se han registrado por lo menos dos incendios que han consumido 580 hectáreas de vegetación en Yucatán, como preludio a lo que podría suceder este 2025, si se toma en cuenta el importante incremento de siniestros forestales durante 2024 y 2023 y las altas temperaturas previstas para los siguientes meses.
De tal forma, que el estado enfrentaría un panorama adverso en materia de incendios forestales para este 2025, luego de experimentar un incremento sin precedentes en la superficie afectada durante 2024.
Las estadísticas de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) revelan que el año pasado se registraron 29 incendios que devastaron 19,389.14 hectáreas en territorio yucateco, un aumento del 869% en comparación con las aproximadamente 2,000 hectáreas afectadas en 2023.
La tendencia preocupante continúa este año. En febrero, un incendio en la entidad afectó 80 hectáreas de vegetación herbácea, mientras que en Tizimín recientemente se reportaron daños en 500 hectáreas, incluyendo pastizales y carrizales. Estos primeros siniestros encienden las alarmas sobre lo que podría ser otra temporada crítica.
Este panorama se podría entender como consecuencia principal de las altas temperaturas y al aumento en la presencia y velocidad de los vientos en la península. Las condiciones climáticas extremas han jugado un papel determinante, con 41 días de calor catalogado como peligroso durante 2024 y temperaturas globales que se mantuvieron 1.28°C por encima del promedio histórico del período 1951-1980.
En respuesta a esta situación, las autoridades estatales han implementado una serie de medidas preventivas de cara a la temporada 2025. Entre las acciones más destacadas figura la instalación del Comité Estatal del Programa de Prevención y Combate de Incendios Agrícolas y Forestales, la creación del primer Centro Estatal del Fuego para coordinar estrategias interinstitucionales en la materia, el calendario quemas controladas y la línea telefónica de emergencia (800-Incendio) para reportar quemas no autorizadas y focos de incendio detectados por la población. Esta medida se complementa con la instalación de cinco torres de vigilancia en puntos estratégicos del estado.
Las proyecciones climáticas en Yucatán para este año sugieren que será similar a las del año anterior, con sequías prolongadas, temperaturas elevadas y alteraciones en los patrones de lluvia. Ante este escenario, las autoridades hacen un llamado urgente a la población para denunciar quemas no autorizadas para evitar incendios.
Texto y foto: Acom