LIC. DAVID COLMENARES PÁRAMO
AUDITOR SUPERIOR DE LA FEDERACIÓN
brunodavidpau@yahoo.com.mx
Con la salida de Rogelio Ramírez de la O de la Secretaría de Hacienda, algunos le criticaron injustamente con adjetivos que no se merece. Rogelio, egresado de la Facultad de Economía de la Unam, titulado en la Universidad de Cambridge en Inglaterra, el primer mexicano en titularse, autor desde joven de brillantes textos de economía, y extraordinario consultor internacional. Además de ser un economista reconocido en su gremio, del cual formó parte, es un hombre íntegro, un gran economista, reconocido aquí y a nivel internacional.
Hace algunos meses nos encontramos un grupo de economistas egresados de la Unam y vinculados al Colegio Nacional de Economistas, lamentablemente ya varios habían muerto, entre ellos Armando Labra, Jesús Puente Leyva, Rodolfo Becerril, Antonio Gasol, Manuel Aguilera, etcétera. La maestra Ifigenia Martínez estaba enferma, etc.
Estaban Rogelio, el actual rector de la Unam, Arturo Lomelí, Enrique Dl Val, Enrique Quintana y Lucy, Graciela Márquez, directora del Inegi, Gerardo Esquivel del Colegio de México, perdíamos a Carlos Tello y a Guillermo Ramirez. Si estuvo Ricardo Carrillo Arronte y el decano del Colegio Jorge de la Vega con Julio Millán, Pablo Arroyo y Maru Romero, su compañera, quien entre otras obras ha escrito “La Historia del Neoliberalismo en México”, publicado por el Fondo de Cultura Económica, dirigido por Paco Ignacio Taibo II. Un egresado de la Universidad de Veracruz, Emilio Barriga y Jaime Valls, extitular de la Anuies; en suma, economistas y ciudadanos extraordinarios.
El nuevo Secretario de Hacienda, Edgar Amador, es otro brillante economista egresado de la Unam. Y sus resultados lo demostraran.
La coyuntura actual, requiere siga siendo la economía manejada con talento, prudencia y nacionalismo. En virtud de que en el contexto de la política fiscal, en su vertiente recaudatoria, debemos fortalecer y apoyar a los municipios para que mejoren la recaudación local del impuesto predial, un impuesto a la propiedad, que en México tiene lamentablemente niveles muy bajos, en relación a países del sur del continente.
Desafortunadamente, hemos padecido una ineficiencia recaudatoria, particularmente por parte de los municipios, tanto los pequeños, pero más en algunos grandes. Cuántas veces he escuchado a los municipios pequeños decir que no cobran eso “porque tiene un costo político”. Se vuelven dependientes de las cada vez más apretadas tesorerías estatales. Es muy común que a fines de los mesesde noviembre y diciembre, los presidentes municipales se acerquen a las autoridades estatales para solicitar “recursos adicionales” o prestados, para poder pagar sus aguinaldos, cuando tienen todos los mecanismos paraprevenirlo, con un esfuerzo fiscal mínimo.
Una anécdota: recuerdo alguna vez que un grupo de gobernadores en la primera década de esta siglo se reunió con el secretario de Hacienda y uno de ellos que había sido presidente municipal dijo: “Mira yo he sido presidente municipal; sin embargo, los municipios de hoy no hacen caso y no hacen previsiones para los aguinaldos. Por ello he estado pensando hacerles ‘su guardadito’. ¿Tú qué piensas?” El secretario les contestó: “tienes toda la razón, como los gobernadores son iguales, voy a pensar cómo hacerles también su guardadito …”
Hoy las cifras nos muestran que estamos muy por debajo de lo que recaudan de predial, países como Argentina, Chile, Brasil, incluso, Costa Rica y Colombia. Nuestro promedio era de 0.25 por ciento en 2023.Claro, hay algunos estados que lo hacen mejor que otros, particularmente la Ciudad de México y Quintana Roo, y Estado de México no tiene malos resultados, aunque puede mejorar, así como algunas entidades del norte del país. A nivel estatal hay buenas experiencias, que tendré que comentarlo en otra ocasión.
brunodavidpau@yahoo.com.mx.