Gustavo Rodríguez Vega, el Arzobispo de Yucatán es la generación de noticia ante una imagen similar a su jefe mayor el Papa Francisco. De acercamiento con la gente, sectores prácticos y sensibles, con muestras de cierta humildad para penetrar en el ánimo del religioso pueblo de la entidad.
Comentan que desde antes de su llegada revisaba todo los datos de los actos en que participaría y la asistencia correspondiente. Contrario en gran manera en el último acto oficial en el Congreso del Estado en donde a pesar de ser también acto solemne, más pudieron cuestiones de hígado de los jerarcas para no enviar invitación a quien pudieran considerar sus contras políticos. Con esas acciones las palabras quedan huecas y ya no se le toma el pelo a los ciudadanos, políticos o no, esto en boca de analistas locales.
Paso a paso el líder católico demuestra por qué fue enviado a esta plaza cuna de grandes acontecimientos y tradicionalmente ajustada esa asociación religiosa a las facetas del poder público. La buena voluntad demostrada por ambas partes y lo fresco que pudiera representar Rodríguez Vega irá forjando también la fuerza de participación en la vida en fe, social y hasta en lo que conlleva en política cívica en su momento como se ha observado en el caminar de la historia. Pendientes de los siguientes acontecimientos en común.
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Desde luego que doña Ivonne Araceli Ortega Pacheco tenía que reaccionar ante acontecimientos muy comentados recientemente. Ya hasta habló bien del Jefe del Poder Ejecutivo dicen que por dos motivos. Uno, para sacar nota y hacer pasar lo anterior, y dos, por la cercanía de los nombramientos para el gabinete estatal y es lógico que está buscando acomodo para su gente.
Un estilo de respuesta. Enmarcando los tiempos para accionar en lo más adecuado de las circunstancias que cuando menos en esta segunda parte del sexenio seguirá ejerciendo presión. Son del mismo partido, aunque los lugares son distintos. Ella ya ejerció la silla mayor, ahora, hay otro que tiene que construir su destino y razón de gobernar. Hay mediciones también en esos lares, según trasciende desde los rincones de la ex Casa del Pueblo.
Desafortunado accidente el de un niño huésped de una instancia oficial. Sin embargo parece que no fue la respuesta adecuada el recordar el historial de una familia cuyos conflictos llevaron a varios niños de ese mismo núcleo a esa institución como su destino de forjamiento. Argumentan conocedores de los manejos de la comunicación que se debió de confrontar el hecho, afirmar lo que se está haciendo de investigaciones y dar un dictamen en su momento. Si hay ciertas culpas o no, sustentarlas, pero no con la historia de unos niños y una familia en situación vulnerable.
No cayó muy bien el sistema de la historia familiar. Se supone que hay experiencia para eso y más. No se hizo nada con dolo. En efecto fue un accidente, y como tal se le da el tratamiento. No con el expediente familiar que debe ser confidencial por las condiciones de quienes caen en la necesidad de ser transferidos a ese tipo de asistencias. Alguien debió de haber cuidado las formas, sin cambiar el fondo. Un accidente.
El diputado federal, Mauricio Sahuí Rivero, dos veces aspirante a la candidatura del PRI por la presidencia municipal de Mérida ha declarado que lo más importante para él ahora es terminar bien su trabajo en legislativo y sus gestorías. Prudente en sus últimas actuaciones, a medio gas sin desgastes, va hacia la meta de un eslabón más en su carrera política desde el cubrimiento de Ivonne Araceli Ortega Pacheco.
Se da casi como un hecho, el que será activado muy pronto para que continúe en esos caminos del servicio público, tiene ramas y relaciones de donde extender su futuro que por algunas circunstancias ha sido detenido. Pero, esto es permanente, y él brindará lo mejor de sí cuando presente su balance de su permanencia como diputado federal.
Comentan ahí en sus oficinas por Cupules que entregará resultados concretos tanto como coordinador de sus compañeros diputados por Yucatán, como las labores que le tocaron desarrollar en las distintas comisiones en las que participó. Además de sus programas populares como el de becas y visitas a algunas colonias. Le alistan, se comenta, un nuevo escenario para este activo del vigente PRI. Veremos.
Vaya que ha habido varios intercambios de carpetas en las propuestas de los funcionarios que entrarían al gabinete del presidente municipal electo por Mérida, Mauricio Vila Dosal. Son líneas directas que van llegando con ciertas recomendaciones y que siguen filtrando los agentes dispuestos para ello. La suma de quienes desean repetir también está contemplados en las situaciones de grupos que aportaron en la campaña correspondiente.
Hay más allá de puntos visibles, aquellos acordados desde muros externos y que se verán, como se ha visto en ocasiones anteriores con ciertos nombramientos representando sobre todo a grupos empresariales. No todo es asunto de partido, surgen alianzas en los que va de por medio temas flotantes que hay que aterrizar. Por cierto gente cercana al ex priista Roger Torres y quien se alejara en su momento de ese partido por cuestiones laborales con Jorge Carlos Ramírez Marín; disfrutó mucho el triunfo panista con el aderezo de que el hijo del ex secretario de la Sedatu participó como candidato a regidor en la panilla del PRI. Cosas de la vida política, que se seguirán viviendo con las mezclas de otras porciones de casos y actitudes. Así que, pendientes todos. Se van acercando los nombramientos.
