En estos últimos días del presente calendario, trasciende desde las líneas directas de los asiduos a los palacios, que se han estado teniendo tiempos para evaluaciones por áreas. Se van midiendo las metas, fortaleciendo lo que se puede antes de informar y cuidando las asignaciones previas para los recursos hacia el 2016.
Dicen que hay más de dos grupos que hacen tareas respecto de ello, para luego sacar un concentrado que se presenta con la explicación correspondiente a la Superioridad, desde donde se toman las últimas decisiones, cambios, modificaciones o adecuaciones. El cuarto año de gobierno zapatista busca entrelazar más el eje de coordinación institucional con todos con el fin de aprovechar las bolsas presupuestales disponibles y brindar imagen de equipo, según se apunta en los reportes de los sellos de índices de los constantes palacios.
Ya hay algunos que muestran con orgullo logros, otros son más prudentes y hay un grupo que se sabe no ha alcanzado sus metas por diversas circunstancias. La indicación alterna es tomar la debida nota y, ayudar para no perjudicar en lo general, aunque se verá cual va a ser el destino de los que simplemente no han estado a la altura del máximo líder, tomando, desde luego, los parámetros de responsabilidad.
La impecable personalidad del gobernante en turno, ya en su segunda parte de ejercicio constitucional don Rolando Rodrigo Zapata Bello mantiene ese estatus personal. La manera de dedicación, esfuerzo y el ceder en acuerdos con otros grupos para mantener lo mayor de estabilidad política, sobre todo de su partido el PRI, lo siguen conduciendo en ese manantial llevadero de resultados visibles.
El ex diputado federal y ex secretario de gobierno con doña Ivonne Araceli Ortega Pacheco camina, trota y en otras corre hacia la meta que se tiene establecida. Además de las pautas que le van surgiendo al paso de su gobierno. Se da la sensación en opinión de los elementos de los palacios, que se ha asentado con su círculo muy íntimo de tres o cuatro personajes que le ayudan a dar matiz a cada acción, relación o alejamiento de algo o alguien.
Expertos en cuestiones políticas, suman que estas cuestiones pueden pasar al paso de los años, cuando las cargas y presiones de trabajo son muchas y, se delegan funciones que en ocasiones tienen destinos que los propios gobernantes no llegan a conocer ante la prioridad que le dan a otros temas. Sin embargo, podría no aplicar las estadísticas para el caso Yucatán.
Lo que sí concuerdan es que la razón de ir obteniendo más trabajo tangible, medible y de profundidad hasta los hogares yucatecos va haciendo eco en el día a día. Por varios puntos de Mérida y el interior del estado se escuchan buenas calificaciones para el también ex diputado local y ahijado del bien recordado ex Gobernador de
Yucatán, Víctor Manuel Cervera Pacheco. Hace sentir que su naturaleza es precisamente esa la de la entrega, dedicación, buscar siempre lo mejor para su pueblo bajo programas certeros. A nivel nacional se mantiene ese requerimiento que pide nuestro México por gobernantes comprometido, responsables, visionarios y de trabajo permanente. De nuevo reafirman los tradicionales autodenominados palacios, “buen tiempo para Yucatán”.
Víctor Hugo Lozano Poveda alto funcionario del Ayuntamiento de Mérida, está siendo recompensado por su esfuerzo en campaña que lo llevó a inesperada derrota para muchos panistas. Pero, el ex director de Transporte del gobierno de la entidad con Patricio Patrón Laviada logra ponerse en sitios en donde hay. Sí en donde hay manejos en operatividad, economía y soltura política.
Quizá su perfil le da esa facilidad. Desde las oficinas partidistas de la calle 58 trasciende que asociado con un hermano puede ser que estén en el ramo empresarial de los ahorros, bien ganados, al paso de sus puestos políticos. Del gasto en campaña, pues con el sueldo, prestaciones y el aguinaldo tendría un respiro para reponerse en caso de que fuera necesario.
Se le ve a Víctor Hugo sólido, en lo suyo. Hay jugada para él y sus funciones. Le permitirá aumentar sus posibilidades de subsistencia a lo largo del presente récord partidista y en la función pública de las zonas regionales. En diciembre se verá a un Víctor Hugo movido en las denominadas posadas y fiestas decembrinas para abrazar las esperanzas de continuidad. Está en su derecho y en benéfico tiempo.
Los empresarios de la industria de la construcción han indicado que esperan un próximo año con más rentabilidad. Lo que hace suponer que en el calendario por terminar no se cumplieron sus expectativas. Cada vez que hay un anuncio de su ramo surge la inquietud por ver las dimensiones de inversión y ocupación. Aunque en la entidad más allá del sector público se manejan elementos particulares con varios surcos propicios para trabajar.
El gobierno estatal anda muy activo con el nuevo Centro de Convenciones en la zona centro de Mérida. Un producto con el que se desea dejar huella. Una bandera para recordar. Además de que, aplica para forjamiento del mercado de convenciones y eventos de buena magnitud en calidad y número, según asuntos anotados desde los voceros pertinentes. Ya se ven las instancias desarrollando lo propio para cumplir con los tiempos en los terrenos adquiridos para tal fin.
En una manera adicional que no se debe vincular con lo institucional, se confirma que funcionarios locales andan antes de los aguinaldos también supervisando sus obras particulares; unos para en este diciembre poder dar el brindis de estreno con todos los aditamentos de confort y seguridad; otros emparentados en ese
mecanismo de superación de bienes comentan de ampliaciones también con todos los implementos de primera calidad. Vaya el buen gusto y la economía, así lo permiten, nada fuera de la ley, sino parte del esfuerzo del trabajo y constantes ahorros. Tendrán buen fin de año, agregó director de portal de noticias por internet conocedor de esos supuestos casos. En fin. Todos tienen derecho, reviró comunicadora que comparte con dos empresas locales sus labores diarias. Mejor, pendientes todos.