Armando Escalante
Periodista y analista político
Mientras algunos siguen embriagados en su luna de miel, parados sobre un ladrillo de poder, creyendo que los demás nos tragamos sus mentiras, el presidente Manuel López sigue avanzando en su despropósito de desmantelar y detener todo aquello que signifique avance, modernismo e inversión. Nadie le hace frente. Ninguna cámara empresarial se atreve a elevar la voz y protestar por los bloqueos ferroviarios en Michoacán, tampoco condenan la “desreforma” energética que acabará con las energías limpias y mucho menos hay quejas por los miles de habitantes que deben huir de sus comunidades ante el avance del crimen organizado que el peje se niega a combatir.
Llevar a México al fracaso económico es su meta, pero la disfraza de un nacionalismo trasnochado, que carece de sustento y bases, en medio de una economía globalizada que él parece desconocer. Recuperar el poder y control de los viejos esquemas que controló el PRI en los 70 y que fracasaron por ineficiencia y corrupción, son la bandera de este mal gobierno. Y todos sin protestar.
El engaño matutino de todos los días como mecanismo de lavado de cerebro funciona a la perfección; ni la maquinaria priísta de fraudes electorales —que alguna vez operó casi perfecta— estaba tan bien aceitada como sucede con este despropósito de López de mentirle a diario a sus creyentes seguidores. Sabe que no hay quien lo rebata y sigue desbocado.
Y solo, sin freno, sin contrapeso, con gobernantes sometidos incapaces de filtrar todo el desastre que les causa, el presidente se dispone ahora a destruir las energías limpias, a desbaratar todo lo avanzado en materia de inversión privada, presto a cancelar negocios, acabar con miles de empleos y fastidiar a los mexicanos. Se sospecha que contará con el aterrorizado Alito Moreno que con la amenaza de su sucesora, accederá a cooperar con el presidente.
Y por si no faltaran distractores que apoyen el desastre que causa Amlo, ahora resulta que en el periodico El País se ha dado a conocer que “la caja de pandora se ha abierto en las élites mexicanas” mediante la filtración de alrededor de 12 millones de documentos, en los que se sabe cómo algunos de los personajes más ricos y poderosos del mundo recurren a empresas de papel, fideicomisos opacos y maniobras financieras para trasladar sus fortunas a jurisdicciones offshore, lejos del alcance de las autoridades fiscales. Se trata de la última investigación coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (Icij) y de la que forma parte el diario español.
Dice este reportaje que además es reproducido por Proceso, El Financiero y otros medios más, que hay más de 3.000 mexicanos que figuran en los papeles de Pandora, y entre ellos están los nombres de Julio Scherer, exconsejero jurídico de la Presidencia; Jorge Arganis Díaz Leal, secretario de Comunicaciones y Transportes; el senador Armando Guadiana, y Julia Abdala, pareja de Manuel Bartlett, titular de la Comisión Federal de Electricidad. El alcance de los documentos es amplio e incluye también a antiguos aliados del expresidente Enrique Peña Nieto, celebridades y multimillonarios como Germán Larrea y María Asunción Aramburuzabala, la famosa empresaria que vio nacer consorcios cerveceros. Hay otros nombres más que aparecen en el reportaje del equipo de investigación pero estamos seguros que no pasará nada. Será otro distractor que desvíe la atención de los graves sucesos que asuelan a nuestra Nación.
El xix.— Están apilando en algún terreno de Umán, kilómetros de rieles viejas, de buena calidad, miles de durmientes de concreto que se pusieron apenas hace unos años y otros accesorios y equipos ferroviarios que desmantelan supuestamente para instalar los nuevos. Un ramal que se acababa de construir y que fue anunciado con bombo y platillos por el gobierno anterior, ya habría sido retirado, sin que nadie audite, ni vigile ni tome nota administrativamente de todo ello. Esos grupos que exigen transparencia —contraloría social— son incapaces de tocar al peje. Nadie se le enfrenta. Todos le tienen terror.
