El número de casos de violencia física contra las mujeres mayas es realmente alarmante. Se estima que el 90 por ciento de las mujeres yucatecas del medio rural la sufre, aseguró la responsable de la Asociación X Justicia para Mujeres, Fátima Gamboa Estrella.
Al acudir a la entrega de certificados para 30 mujeres campesinas que cursaron el programa “Formación de Promotoras Mayas de Justicia”, Gamboa Estrella señaló que este delito es muy grave en las comunidades rurales del estado y que son muy pocas las mujeres que denuncias estos actos.
Ayer en una ceremonia realizada en el patio central de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady) se entregaron 30 certificados a féminas de las comunidades de Halachó, Kinchil, Chikindzonot, Tekom, y Tixcacalcupul, que cumplieron con el curso de capacitación como promotoras de la equidad de género y de apoyo a mujeres que sufren de violencia familiar.
La activista explicó que el problema de la justicia rural en Yucatán es muy complicado, porque en una primera instancia una mujer campesina agredida debe recurrir a un juez de paz en sus comunidades para reportar un hecho. Sin embargo, muchos de estos jueces no saben a qué autoridad acudir para presentar una denuncia y en ocasiones en la Fiscalía desestiman los hechos o simplemente no atienden los casos.
Acusan omisión de las autoridades
Subrayó que el problema radica en que la mujer siempre debe de superar sus miedos y las presiones de su entorno para poder llegar a una autoridad judicial que la proteja, pero esa autoridad es omisa o desestima los hechos y la obliga a retornar a su casa donde seguirá siendo maltratada o vejada.
Gamboa Estrella señaló que éste es el primer grupo de mujeres que podrán ayudar a otras féminas a darle seguimiento a un acto de violencia. Este grupo de graduadas, dispone de los elementos e información para encauzar una denuncia, para dirigirse a la autoridad competente para interponer la denuncia y de la misma forma dar un seguimiento a la acción judicial.
Al ser cuestionada sobre el número de denuncias que se han presentado en la Fiscalía estatal a este respecto, indicó que la dependencia estatal no tiene dato alguno de lo que representa este delito, de las personas consignadas por este tipo de infracciones y mecanismos de implementación de apoyo a mujeres maltratadas del medio rural.
Indefensas
El problema, replicó la entrevistada, es que, las mujeres campesinas mayas están indefensas ante las agresiones de las que son objeto y las autoridades poco o nada hacen para revertir este tipo de actos que tanto laceran los derechos y la condición de las mujeres.
Dijo que estos cursos de capacitación se ofrecieron desde dos organizaciones no gubernamentales, X Justicia para las mujeres y Fundación Apis, – Fundación para la Equidad AC., que recibieron un patrocinio de la Fundación Kellogg’s para completar el curso y otorgarles a las mujeres campesinas un proceso de acompañamiento a estos problemas de violencia.
– José Cortazar Navarrete
