Si bien la contaminación del agua en Yucatán afectará a todos sus habitantes, son los grupos más vulnerables de las comunidades quienes resentirán este problema, por lo que la doctora Yolanda López Maldonado, académica de Barcelona, hizo un llamado a la sociedad a cuidar este recurso hídrico de la región.
La también docente del Instituto Beijer en Suecia señaló la desigualdad que existe entre la sociedad y cómo les afectan las consecuencias ambientales, tales como un huracán.
En el caso de la entidad, comentó, se tiene un problema severo con la calidad del agua, no contar con ríos en la superficie es un punto en contra, ya que lo que se consume se saca del subsuelo.
“Una persona que vive en el Campestre, en una comunidad, o en Montecristo, todos usamos la misma fuente de agua y quiere decir que en algún momento que se acabe o se contamine, todos seremos afectados, pero los que van a resentir estos efectos son las personas vulnerables”, compartió ante representantes de los medios de información.
Lo anterior debe generar un compromiso entre la misma sociedad para cuidar este recurso, pues “al final no cuenta que tengas dinero o no, o que tengas una casa o no, todo mundo va a padecer la contaminación del manto acuífero”.
Entre las acciones a tomar, López Maldonado mencionó el trabajo colectivo, es decir, en caso de tener un pozo de agua en casa deben tomarse las medidas necesarias ya que todos están interconectados en la misma red, y de nada servirá que una persona haga su labor si el vecino no contribuye.
“Todas las actividades humanas pueden contaminar el agua, pero son los procesos industriales lo que afectan más; sin embargo, se tiene que poner en primer lugar a la naturaleza, las dinámicas de los sistemas ecológicos y después, los sistemas de gobernanza y grupos afectados. Siempre hay soluciones, pero debe haber empatía”, añadió.
Al cuestionarle si hay un tiempo para dar atención al problema de la contaminación del agua, recordó ser un sistema ecológico complejo, es decir, se necesitaría mucho para comprender cómo funciona la naturaleza, pero hay datos que arrojan que se está acabando el agua subterránea.
“Más que pensar que va a pasar en 10 años, uno tiene que tomar acciones ya, para evitar esos futuros problemas que puedan enfrentar como sociedad yucateca”, indicó.
La entrevistada participó en el Séptimo Congreso de la Facultad de Ingeniería Química (Confiq), con su ponencia denominada “Calentamiento global, objetivos de desarrollo y desigualdad: Contribución del conocimiento científico y local para la mitigación del cambio climático”.
Texto: Jesús Gómez
Fotos: Jesús Gómez / Cortesía