Durante el recorrido, Joaquín Díaz Mena reitera el apoyo de su administración a las familias afectadas para que puedan ir retornando a sus hogares y retomen sus actividades cotidianas
Aunque el huracán “Milton” se degradó en las primeras horas de ayer martes a categoría 4, sus bandas nubosas ocasionaron en las siguientes horas importantes daños en municipios ubicados en la costa yucateca. En Celestún, por ejemplo, se reportó que el 70% de las viviendas resultaron dañadas o inundadas.
Ante esta situación, el gobernador Joaquín Díaz Mena, acompañado de diversas autoridades, se trasladó a dicha población, donde reiteró el apoyo de su administración a las familias afectadas, con el objetivo de que puedan regresar a sus hogares y retomar sus actividades cotidianas lo antes posible.
Uno de los puntos visitados fue el albergue temporal habilitado en la iglesia de La Purísima Concepción, donde el mandatario estatal, acompañado del alcalde Germán Jesús Cauich Pinto, conversó con las personas que se refugiaron allí para evitar los fuertes vientos y lluvias provocados por el fenómeno meteorológico.
Tras destacar la importancia de la colaboración entre autoridades y ciudadanía, ofreció regresar con paquetes de despensas para los afectados, además de que se levantará un informe del estado que tras el paso de Milton guardan las viviendas e infraestructura portuaria, a fin de que se realicen las reparaciones necesarias.
También instruyó a la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) para poner en marcha medidas preventivas en zonas vulnerables como “Cartolandia” y la colonia Felipe Carrillo Puerto de Celestún, con el fin de evitar brotes de enfermedades como gastroenteritis y dengue.
Asimismo, señaló que el personal del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Yucatán y la Secretaría del Bienestar realizarán un recorrido de supervisión de daños que abarcará desde Celestún y Sisal hasta Progreso, Chelem, Chicxulub, Chuburná Puerto, Telchac, Dzilam de Bravo y El Cuyo, en el municipio de Tizimín.
Cabe destacar que en la conferencia mañanera de ayer de la presidenta Claudia Sheinbaum, el gobernador Joaquín Díaz Mena dio un reporte sobre la situación que guardaba Yucatán tras el paso del huracán “Milton”.
Reanudación de actividades
Al concluir su visita a Celestún, el Gobernador participó en la sesión del Comité de Emergencias del Consejo Estatal de Protección Civil, en la que se decidió reactivar todas las actividades del Estado tras la disminución del riesgo, y de manera posterior, se trasladó a Progreso, donde en compañía del alcalde Erik Rihani González y de autoridades de la Marina y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Díaz Mena recorrió el “Muelle de Chocolate”, uno de los principales atractivos turísticos de la localidad, que también sufrió daños a causa del huracán.
Díaz Mena agradeció la colaboración de la ciudadanía y subrayó que, gracias a las medidas de prevención, se logró un saldo blanco.
En recorrido por la zona del Malecón Tradicional, el equipo de Peninsular Punto Medio observó que fue tal la intensidad de los vientos que empujaron el agua de mar hasta la calle, que quedó en varios tramos cubierta de arena.
Cabe destacar que a pesar de que la policía municipal colocó cintas amarillas para delimitar el área e impedir el paso a la gente, a lo largo del día llegaron muchas familias para ver cómo quedó el lugar después del paso del huracán, a quienes no les importó meterse a los encharcamientos que se mantenían, por ejemplo, en el Malecón Internacional.
Asimismo, otras secciones de los andadores de madera sufrieron daños, al igual que el carrusel que se encuentra instalado en el Malecón Internacional, cuyo toldo se levantó, además de que varias partes de madera se desprendieron de esta atracción ya icónica del lugar.
De igual manera se reportaron daños en el muelle de Chicxulub Puerto, que amaneció cubierto de escombros, y con posibles daños estructurales, mientras que en Chelem quedó destrozado el muelle de pescadores, un atractivo turístico que apenas se inauguró en Semana Santa y cuya atracción era la figura de un tiburón prehistórico, un megalodón, en cuyas fauces abiertas el público se podía tomar una fotografía, y cuyos restos quedaron esparcidos en la playa.
En Chuburná Puerto, vecinos reportaron que una antena de radiocomunicación ubicada sobre el techo del ex centro de salud, se mecía con el fuerte viento y amenazaba con caer sobre los cables de electricidad o sobre la carretera, por lo que pedían la intervención de las autoridades.
Fue tal la furia de “Milton” que en esta misma comisaría progreseña ocasionó el derrumbe de una casa ubicada en la playa, al parecer de una pareja de canadienses que de último momento decidió ponerse a resguardo en un albergue, decisión que les salvó la vida.
Dicho predio se encuentra ubicado en la calle 5 entre 24 y 26, muy cerca de la salida al puerto de abrigo de la mencionada comisaría.
Para el día de hoy, el gobernador Joaquín Díaz Mena tiene previsto una gira más de supervisión de daños a Celestún y Sisal.
Milton se aleja de Yucatán, pero sus remanentes no dejan duda de su furia
Tras el paso del huracán “Milton” en la costa yucateca, las calles aledañas al Malecón Internacional de Progreso se encontraban inundadas. Había partes que alcanzaban más de 20 centímetros de agua.
Ayer aún se sentían los remanentes del meteoro durante todo el día, por momentos los vientos alcanzaban gran intensidad, el oleaje aumentaba de tamaño y llovía de manera intermitente.
Debido a que se suspendieron las clases, al igual que la jornada laboral en la mayoría de las empresas sólo algunos comercios abrieron sus puertas, por lo que en las calles había pocas personas.
En el Muelle de Chocolate había una feria, que cuenta con una rueda de la fortuna y un carrusel que resultó dañado por el huracán.
Un agente policiaco pidió que nos retiráramos del lugar por las las ráfagas de aire que todavía se sentían. Explicó que alguna parte pieza de los juegos mecánicos o del muelle pudieran convertirse en proyectiles por los fuertes vientos y que en caso de un incidente a él le llamarían la atención.
Pese a las restricciones, no faltaron quienes acudieron a la playa para observar las inundaciones y constatar la fuerza del viento.
Indiscutiblemente, una vez más, un errático huracán es benévolo con el Estado, pues Milton alcanzó la categoría 5 con vientos de 280 kilómetros por hora y rachas de 330 kilómetros, considerado como potencialmente destructivo, aunque se mantuvo a poco más de 50 kilómetros de la costa yucateca.
Debido al calentamiento de los océanos se ha tenido una temporada más activa dehuracanes. En junio de este año llegó “Beryl”, con categoría 5 y que para esas fechas lo máximo que había alcanzado un huracán era 3.
En las redes sociales, el huracán “Milton” fue de lo más consultado y respecto al fenómeno a la par de la información generada sobre el meteoro, surgieron todo tipo de memes y contenidos como el de una joven no originaria del estado que elaboró un video en el que aseguró que los huracanes eran “invento de los yucatecos”, a fin de que decretaran suspensiones de labores, pues “los yucatecos eran flojos”, por lo que se ganó el mote de “Lady huracán”. Luego de una avalancha de críticas, esta persona tuvo que retractarse.
En Yucatán, los meteoros más temidos son los que llegan en septiembre como lo han sido “Gilberto” (1988) e Isidoro (2002), pero precisamente porque hay una temporada activa a ninguno se le puede minimizar. Igual hay quienes aseguran que los ciclones suelen ser cíclicos, ya que entre “Gilberto” e “Isidoro” hay 16 años de diferencia, pero como ha señalado el meteorólogo y vocero del Comité Institucional para la Atención de los Fenómenos Meteorológicos Extremos de la Universidad Autónoma de Yucatán, Juan Vázquez Montalvo: “esto no es la lotería”.
Texto y fotos: Manuel Pool/Darwin Ail