Apicultores luchan para que la gente consuma productos de las abejas

En el negocio se ofrece venta de miel apis, con cúrcuma, melipona, perlitas de propóleo, cremas, jabones, entre otros

Pese al robo de colmenas que suelen sufrir los apicultores, la sequía y que algunos alemanes hayan optado por comprar miel a Ucrania en lugar de Yucatán, ya que la de este último tenía rastros de transgénicos, la apicultora Lolina Beatriz Sauri Aguilar confía en que las autoridades no dejen de apoyarlos, dado que el objetivo de su negocio Sauri Apicultores es que la gente consuma más los productos de las abejas.

En su establecimiento, ubicado en el predio marcado con el número 423 de la calle 55 por 46 y 44, del Centro, por el rumbo de la exestación del tren (Esay), se ofrece venta de miel apis, miel con cúrcuma, miel melipona, perlitas de propóleo, propóleo en spray y gotero, crema enriquecedora y humectante, miel con semillas, jarabe para la tos, jabón de miel, y también de avena, jalea real y polen.

En entrevista para Peninsular Punto Medio, Sauri Aguilar explicó que sus colmenas las tienen en Sinanché,  y que se están recuperando ya que tuvieron una fuerte pérdida durante el paso de las tormentas Cristóbal y Amanda en 2020.

“Quedaron entre lodo, los cajones tenían sapos y culebras y había que tener mucho cuidado. Luego meses después un rayo le cayó a un transformador y eso propició que quedemos en la oscuridad”, recordó.

También otro enemigo que tienen, además de los ladrones, son las abejas africanizadas que atacan la colmena y que para sacarla se requiere conseguir a una reina.

“Siento que no nos dan nuestro lugar como apicultores, a veces hasta los compradores intentan machetear el precio, piensan que nuestro trabajo es fácil”, dijo.

Una buena parte de alemanes dejaron de comprar miel ya que vieron que tenía rastro de transgénicos y se debió a que cuando se embarcó la pusieron cerca de la miel de Campeche, que está contaminada pues los menonitas usan esa tecnología para sus cultivos.

“Regresaron toneladas de miel y ahora le están comprando a Ucrania”, destacó.

Sobre el caso del robo de colmenas indicó que hace poco a un apicultor de Tizimín le robaron 80 colmenas.

Lo arruinaron, lo extraño es que ¿dónde se lo llevan? Las abejas no es algo que sea fácil de estar agarrando, está muy sospechoso el robo”, sentenció.

“Creo que no se sabe de la importancia de su función que aportan como el de ser polinizadoras, los árboles que cuentan con abejas tienen un follaje frondoso y robusto. Ese fue uno de los motivos, que aquí fracasaron los invernaderos ya que al estar cerrados no ingresaban las abejas hasta que luego intentaron hacer orificios para que pasen, pero ya fue demasiado tarde”, añadió.

Uno de los productos que suele vender por cajas es la miel con cúrcuma, jengibre y pimienta, que es un desinflamatorio.

Explicó que el polen cuando ellas regresan del campo los tienen en sus patitas, que se sacuden y eso sirve para las alergias y la memoria; también está la jalea real.

Por último, señaló que el litro de miel lo vende a 110 pesos y el medio kilo de cúrcuma a 150 pesos.

“Vamos a las ferias de emprendedores como la ecológica, que está anunciada a finales de este mes, en el centro comercial la Isla acuden una vez cada 2 meses”, remató.

Para mayores informes hablar al celular 9999 22 74 60, también pueden buscarla en la cuenta del Facebook Sauri Apicultores o al correo electrónico lolinasauri@hotmail.com.

Texto: Darwin Ail

Fotos: Cortesía