Se estima que 110 millones de pesos son los que se destinan a los suministros, anticipos y diésel para que las embarcaciones salgan al mar
La captura de pulpo sin lugar a dudas se ha convertido en el principal motor económico y la principal pesquería en Yucatán, tanto por los volúmenes de captura que se obtienen, como por el número de pescadores que participan en su captura y los empleos que de manera directa e indirecta genera durante los 135 días que dura la “pulpeada”, del 1 de agosto al 15 de diciembre.
Para el inicio de la temporada pulpera, de acuerdo con pescadores de la flota mayor, ribereños, patrones de embarcaciones y armados, la inversión que se hace para avituallar a los pesqueros, lanchas y dar anticipos a los pulperos se estima en unos $110 millones.
La inversión en los barcos de la flota mayor para la salida es de $250,500 en promedio. En la “pulpeada” participan en total unas 400 embarcaciones, así que la derrama económica se estima será de $100 millones.
El gasto fuerte es en anticipos: cada uno de los 13 pescadores y el cocinero reciben $8,000 ($112,000 en total), más los $15,000 que se le otorga al patrón del barco, que suman unos $127 mil en anticipos.
Un barco lleva 18 toneladas de hielo, que cuestan $12,000; carnada, por la cual invierten $20,000; en diésel se cargan 3,000 litros, por el que se pagan $48,000; más $30,000 en víveres; $8,500 en plomos y otros $5,000 en ferretería (hilos y anzuelos).
La millonaria inversión en los barcos de la flota mayor se hará en cada viaje, pues tendrán que ser abastecidos con hielo, diésel, carnada, víveres, ferretería y anticipos económicos a los pescadores, cuya cantidad aumentará o bajará de acuerdo con los volúmenes de captura que se obtengan en el primer viaje que realizarán, así como del precio que se pagará y la demanda que haya en el mercado nacional y extranjero.
En cuanto a las embarcaciones ribereñas, por cada una de las 5,000 lanchas, que usarán unos 10,000 alijos, el gasto es menor. Los pescadores estiman que la inversión en cada una es de $2,000, de modo que suman una inversión de $10 millones, que se destinan a la compra de jimbas, carnada, hielo y gasolina.
Texto y foto: José Luis Chavarría