A casi nueve meses de la llegada a Yucatán de la arqueóloga Anna Goycoolea Artís como directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (Inah), son múltiples del voces que señalan que la funcionaria no se deja ver en ninguna clase de eventos públicos, y que es nula su participación en actividades académicas y culturales, e incluso hay personal del organismo que señala que es muy difícil encontrarla en las oficinas, puesto que siempre se la pasa de “comisión”.
La clausura de las ruinas de Mayapán por los ejidatarios de Telchaquillo, el cierre indefinido de la Zona Arqueológica de Dzibilchaltún, la falta de restauración de los monumentos de Paseo de Montejo afectados por las pintas del 8M y la apertura del Teatro Peón Contreras después del incendio, son algunos de los deberes del Inah en Yucatán que no están siendo atendidos oportunamente. Sumado a ello son las quejas por los trámites lentos en la dependencia para restaurar casonas o liberar terrenos, que con la tardanza de respuesta está fomentando el coyotaje.
A diferencia de muchos años, en este periodo vacacional de Semana Santa, ningún funcionario del Inah local ha dado a conocer la existencia de algún operativo para recibir a los cientos de visitantes que acudirán a museos y zonas arqueológicas del Inah, y se tiene información que, pese a todos los focos rojos en el estado, la arqueóloga Goycoolea, desde hace ya tres semanas se encuentra ausente de sus funciones, puesto tiene un viaje personal en el extranjero.
En un recorrido por la dependencia ubicada en la colonia Gonzalo Guerrero de la ciudad de Mérida, se observa muy poco personal laborando.
Texto y foto: Agencia