El delfín que recaló con vida, ayer jueves en el malecón del puerto de Progreso, se recuperó de sus heridas, con el apoyo de especialistas del Programa de Investigación y Conservación de Mamíferos Marinos de la Universidad Autónoma de Yucatán (Picmmy).
Luego de varias horas de cuidados, el ejemplar, un macho de edad avanzada y de 2.7 metros de largo, mostró una notable mejoría en su condición por lo que se consideró regresarlo al mar, luego de verificar sus condiciones para incorporarse al mar abierto.
«El animal está estable. Se muestra con mucha energía. El plan es intentar la liberación. Obviamente evaluar en aguas más profundas su movilidad, su flotabilidad, su orientación», explicó Raúl Díaz Gamboa, responsable del Picmmy.
El animal fue trasladado a las instalaciones de la XIII Zona Naval con el apoyo de efectivos de la armada, pues este sufrió mordidas de un depredador de mayor tamaño por lo que se vio debilitado, y terminó recalando en la costa.
Los especialistas del Picmmy realizaron turnos para cuidar del animal toda noche, con ayuda de personal de la Marina, manteniendo al ejemplar bajo observación y resguardo, con un monitoreo de su condición cada hora.
«Es más que nada monitoreo, pues estamos checando los latidos, las pulsaciones por minuto y la respiración. Estamos viendo que tiene movimiento, entonces, es candidato para liberación. En realidad, sí hubo varias personas, somos varios voluntarios», mencionó Jania Ramírez, estudiante de Biología Marina.
Es el tercer organismo que queda varado en lo que va del año en Yucatán, aunque es el primero que llega vivo.
Raúl Díaz recalcó que es imperante que las personas que avisten un varamiento, lo reporten a las autoridades más próximas, con el fin de que se avise a los especialistas para realizar las acciones pertinentes.