Francisco Haro es el protagonista del triunfo de los pingos, que están a tan solo un juego de acabar con la hegemonía de Yucatán en la Serie de Campeonato
El derecho Francisco Haro apagó la ofensiva de los Leones de Yucatán, con labor que incluyó 11 ponches, y eso permitió a los Diablos Rojos del México venir de atrás para ganar 6-5 y ponerse 3-1 adelante en la Serie de Campeonato de la Zona Sur de la LMB, ante otro lleno en el parque Kukulcán.
Con este resultado los melenudos están obligados a ganar los tres juegos restantes en el compromiso para volver a la Serie de Rey.
Contrario a eso, los Pingos están a una victoria de por fin vencer en esta fase a los melenudos y así volver a la gran final, cuyo rival está esperando, ya que los Sultanes de Monterrey se coronaron en la Zona Norte.
Pese al resultado final, los melenudos estuvieron a punto de dejar en el terreno de juego a los rojos, pero apenas pudieron anotar una vez en la novena entrada con globo de sacrifico de Sebastián Valle, ya que después Bruce Rondón logró el salvamento con ponche a Walter Ibarra y una línea a la segunda de Cristhian Adames.
Ganó Francisco Haro, quien con una pelota casi submarina, abanicó a 11 enemigos. Una gran labor para llevarse el triunfo.
Perdió Jake Thompson, segundo relevista de Yucatán, quien aceptó una carrera en dos innings de trabajo.
Comenzaron calientes
La ofensiva de los Pingos se manifestó en el mismo primer rollo con rally de tres carreras, una por doblete de Roberto Ramos y las otras dos por imparable al derecho de Juan Carlos Gamboa.
En el cierre de ese rollo, los melenudos le dieron la vuelta a la pizarra con ataque de cuatro carreras, lo que, en ese momento, encendió las gradas que se apagaron con las carreras de los visitantes.
Art Charles produjo una con sencillo al central, que remolcó a Christian Adames, después José “Cafecito” Martínez empujó a Luis Juárez con sencillo al prado derecho y las otras dos llegaron por batazo de Joshua Fuentes, quien con imparable remolcó a Charles y a Martínez.
Tras ese batazo de Fuentes comenzó el recital de Francisco Haro, quien entró al rescate del pitcheo visitante.
En su labor de seis y un tercio, Haro se vio inmenso, con apenas dos hits, sin bases y 11 ponches. Es decir, los melenudos no le hicieron ni cosquillas.
Su actuación borró la mala imagen del abridor Henry Sosa, quien fue zarandeado con tres hits y cuatro carreras en dos tercios de trabajo.
La gran actuación de Haro permitió a la ofensiva de los pingos venir de atrás y lo hicieron ante el mismo Liz y los relevistas.
Tras un primer inning de pesadilla, Liz compuso el trabajo y avanzó hasta la quinta entrada, en donde volvió a ser tocado, pero en su auxilio llegó Hunter Cervenka, pero cuando parecía que había ponchado a Ramón Ramos con la casa llena, el bateador fue perdonado por el umpire de tercera. Más tarde, Cervenka golpeó a Ríos y se produjo el empate a cuatro carreras.
En la séptima entrada, el equipo rojo volvió a timbrar con una jugada pocas veces ejecutada: el squezze play.
Con Moisés Gutiérrez en la tercera y Jasson Atondo en primera, Jesús Fabela tocó por la inicial y “El Moy” cruzó la registradora con la quinta carrera.
Los Diablos Rojos anotaron la sexta carrera, que al final fue la del triunfo, en la novena ante Jorge Rondón. Con la casa llena, Ramos elevó de sacrifico al central para remolcar a Julián Ornelas.
Eso del “elevó” es un decir porque realmente la pelota estaba cerca de picar en terreno de nadie, pero Yadir Drake se lanzó de cabeza para atrapar la bola.
En el cierre y también con la casa llena, Sebastián Valle mandó a la goma a Johnny Davis con la quinta carrera de los melenudos, pero Bruce Rondón metió el brazo y ponchó a Walter Ibarra para el segundo out, y después llegó la línea de out de Christian Adames, que puso fin al juego.
Este domingo se jugará el quinto juego de la serie a las 18 horas y los probables abridores serán Elián Leyva por los Leones contra Jeffrey Niño.
Texto y foto: Esteban Cruz / Cortesía
