El Gobierno del Estado, en conjunto con inversionistas de Estados Unidos y del norte del país, presentaron el proyecto de un estadio que se va a construir en Yucatán y que servirá tanto para albergar partidos de béisbol como de fútbol sóccer.
Esta nueva obra será la casa tanto de los Leones como de los Venados de Yucatán, dos equipos de gran tradición en el estado y que tenían sus inmuebles separados por unos cuantos metros de distancia. Pero, ¿qué significa esta obra?, ¿acaso es necesaria en estos tiempos en los que el coronavirus ha paralizado la vida en todo el mundo? Pues bueno, seguramente esto es una pregunta que muchos están haciendo y no tardarán a lo mejor en cuestionar con la construcción de una obra de esta magnitud. Pero en realidad al momento de analizar todos los detalles veremos que tienen mucho más beneficios que perjuicios para el estado.
De entrada, no costará un solo peso al presupuesto estatal, ya que se realiza con capital privado. Además, la infraestructura traerá derrama económica y empleos tanto en su construcción, cómo en su funcionamiento, ya que se trata de una obra que no sólo tendrá eventos deportivos sino que habrá tiendas, hoteles, restaurantes, en fin, todo un complejo que creará mil empleos.
Además, hay que preguntarnos a quién no le gustaría un mejor estadio de béisbol para los Leones o tener un inmueble digno de partidos de la Selección Mexicana de Fútbol, o que incluso equipos de primera división quieran hacer de Yucatán su sede. Sí, quizás el deporte no sea lo más importante en este momento, pero si no hay un riesgo de inversión y se presenta la oportunidad, entonces ¿por qué no?
