Será hasta el próximo 6 de septiembre cuando inicien realmente las clases presenciales en la entidad, ya que durante los primeros días del curso escolar 2020-2021 prácticamente los maestros se entrevistarán con los papás para saber sí optarán por enviar a sus hijos a las aulas.
Mientras llega este momento valdría la pena que las autoridades comiencen a reforzar el número de autobuses para evitar que se saturen y evitar riesgos de contagios, pues persisten aún muchas dudas en torno a la seguridad, especialmente en el caso de los más pequeñitos. Ante está situación, hay padres de familia que optan por jugar de manera conservadora y mantener a sus niños en clases desde casa. Dependerá de qué tan efectivas sean las medidas de prevención que se apliquen, la manera en la que paulatinamente aumente la confianza para mandar a los niños a clases presenciales, pero es claro que se requiere de tener en cuenta que hay que aprender a convivir con el coronavirus.
En cuanto a los maestros vale la pena citar que existe mucha disposición por parte de ellos para colaborar y llevar a puerto este barco que representa la educación en Yucatán, aunque para ello muchos de ellos tengan que hacer sacrificios importantes y trabajar horas extras sin el debido reconocimiento económico. Pero existe un grupo de maestros que está convencido de que no se debe regresar a clases presenciales, y ya se escucha que habrá en estos días una megamarcha para así manifestarlo. A ellos también hay que escucharlos y garantizar el acceso a la educación para todos.