Casi 200 países aprueban la creación de un comité intergubernamental con el mandato de negociar un pacto internacional legalmente vinculante para 2024, que sirva para acabar con la polución por plástico
La Quinta Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente (UNEA-5), principal organismo de toma de decisiones ambientales del mundo, aprobó este miércoles una resolución histórica para negociar el primer tratado global contra la contaminación plástica.
Ministros de medio ambiente y otros representantes de 175 países adoptaron en Nairobi, en el plenario de clausura de UNEA-5, un texto para la creación de un comité intergubernamental con el mandato de negociar un pacto internacional legalmente vinculante para 2024, que sirva para acabar con la polución por plástico terrestre y marina.
“No veo ninguna objeción. Por tanto, (la resolución) queda adoptada”, afirmó el ministro noruego de clima y medio ambiente, Espen Barth Eide, cuyo país ejerce la presidencia de la Asamblea, al aprobar la adopción del texto con un golpe de un simbólico martillo hecho con plástico reciclados de un vertedero de Kenia.
Estamos haciendo historia
“Gracias. Estamos haciendo historia hoy”, subrayó un emocionado Eide ante un plenario puesto en pie que celebró con una ovación cerrada el histórico hito.
Este éxito de la cooperación multilateral culminó, tras intensas negociaciones, la segunda sesión de UNEA-5 en Nairobi, conocida como la “capital medioambiental” del mundo por albergar la sede del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).
El foro, que ya desarrolló su primera sesión en 2021 de forma virtual por la covid-19, adoptó desde este lunes en Kenia una fórmula de participación híbrida con la intervención de más de 3,400 delegados en persona y 1,500 por vía telemática.
La histórica resolución (basada en tres propuestas presentadas por Perú y Ruanda, Japón y la India, respectivamente) aborda el ciclo de vida completo del plástico, incluida su producción, diseño y eliminación.
El llamado Comité Intergubernamental de Negociación (INC, en sus saiglascomenzará su trabajo en 2022, con la ambición de completar un borrador de acuerdo global legalmente vinculante para finales de 2024.
El Comité debe presentar un instrumento que refleje alternativas para abordar el ciclo de vida entero de los plásticos, el diseño de productos y los materiales reutilizables y reciclables.
Además, el tratado tiene que hacerse eco de la necesidad de una mayor colaboración internacional para facilitar el acceso a la tecnología, el desarrollo de capacidades y la cooperación científica y técnica, según la resolución.
El Pnuma emplazará a un foro a finales de 2022 abierto a todas las partes para compartir conocimientos y buenas prácticas en diferentes partes del mundo, e informará sobre los avances durante los próximos dos años.
Una vez finalizado el trabajo del INC, el Pnuma convocará una conferencia diplomática para adoptar su resultado y abrirlo a su firma por los países.
La contaminación plástica, una epidemia
“La contaminación plástica se ha convertido en una epidemia. Con la resolución de hoy (ayer) estamos oficialmente en camino de una cura”, subrayó Eide, cuyo país cederá a partir de este jueves a Marruecos la presidencia de la próxima Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente (UNEA-6), una cita que suele celebrarse con carácter bianual.
La directora ejecutiva del Pnuma (auspiciador de la Asamblea), Inger Andersen, destacó que “el día de hoy (ayer) marca un triunfo del planeta tierra sobre los plásticos de un solo uso”.
“Este es el acuerdo multilateral ambiental más importante desde el acuerdo de París (de 2105 sobre cambio climático)”, enfatizó Andersen.
Estados Unidos, uno de los mayores productores de plástico, también expresó su satisfacción. “Es el inicio del final de esta plaga del plástico en este planeta”, afirmó la subsecretaria de estado de océanos y asuntos ambientales, Mónica Medina.
“¡Se ha dado un gran paso global!”, exclamó desde su cuenta de la red social Twitter el comisario europeo de medio ambiente, O¡océanos y pesca, Virginijus Sinkievicius.
Tras conocerse la decisión de UNEA-5, la reacciones de las organizaciones ecologistas no se hicieron esperar.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) instó a los gobiernos a aprovechar este “poderoso impulso” y eliminar la contaminación plástica.
“Nuestros líderes mundiales están allanando el camino para un futuro más limpio y seguro para las personas y el planeta”, manifestó el director general de WWF, Marco Lambertini, en un comunicado.
La envergadura del problema se plasma en estudios como el que publicó la semana pasada la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que advierte de que la producción de plásticos en el mundo se cuadruplicó en los últimos treinta años y los residuos que generan se duplicaron entre 2000 y 2019.
La OCDE calcula que existen 30 millones de toneladas de plástico en los mares y otros 109 millones de toneladas en los ríos, lo que significa que durante décadas seguirán vertiéndose a los océanos.
Actualmente, el plástico, que puede tardar desde décadas hasta millones de años en descomponerse, representa el 85 por ciento de toda la basura marina, según el Pnuma.
Por eso, toda la vida marina se enfrenta al riesgo de intoxicación, trastornos del comportamiento, inanición y asfixia.
Texto y foto: EFE