El Sol brilla en el Coliseo Yucatán

Con el tema “Culpable o no” el cantante mexicano Luis Miguel abre su tan esperado concierto en la capital yucateca

No hay plazo que no se cumpla ni trago amargo que no se olvide. Por los ánimos desbordados anoche en el Coliseo Yucatán se diría que aquel 7 de febrero de 2015, cuando el artista canceló su show de último minuto, quedó en el olvido, al menos para los incondicionales de Luis Miguel. Esos que agotaron en pocas horas el boletaje y que hizo que el artista abriera por primera vez un segundo concierto para hoy sábado.

En el reencuentro entre Micky y Mérida no hubo muchas palabras, apenas y un “¡Mérida, qué maravilloso público son!”. Pero pareciera que fue suficiente, eso y que sí se presentara, pues hasta pocas horas antes la pregunta que rondaba era la misma: ¿Y si cancela otra vez? Pero El Sol sí brilló de nuevo para deleite de sus seguidores. Lo hizo a cuesta de los años que ya no puede ocultar en el rostro y en medio de su eterno estire y afloje con su equipo de audio.

“¡C…, Micky, ya canta!”, gritó alguien entre las primeras filas, tal vez ansioso de que el artista dejara su obsesión por el audio e interpretara de una buena vez los éxitos que volvieron a los primeros lugares gracias a su serie autobiográfica. Y pareciera que la voz del fan fue escuchada, pues de inmediato los acordes de “Culpable o no” hicieron que el público se uniera en un coro monumental que ni Luismi pudo contener. Él solo dibujó esa enorme sonrisa que ha cautivado a tantos corazones y siguió con “Fría como el viento”, “Entrégate”, “Hasta que me olvides” y “La incondicional”.

A partir de ahí todo fue revivir momentos, los mejores del artista que hoy recorre el país con la gira que le ha dado un nuevo aire a su carrera y el público, la mayoría contemporáneo, que no lo ha dejado de idolatrar a pesar de que no recibió una disculpa del cantante.

El Sol reservó el baile para el final de la velada, a las 23:41 horas, antes abrió paso a los boleros y al mariachi que lo acompaña en su tour “México por siempre”. “¡Luismi, Luismi!”, se escuchó en varios momentos de la noche. Y Luismi no pudo más que dejarse querer, sonreír y deleitar al público con interpretaciones como “Échame a mi la culpa” y “Sabes una cosa”. Pero hacía faltar bailar, y el cantante, aunque ya no como antes, danzó al ritmo de “Isabel”, “La chica del bikini azul” y “Cuando calienta el Sol”, con la que cerró la noche.
“¡Los llevo en mi corazón!”, dijo el artista mientras lanzaba al público un puñado de rosas blancas.

Texto y fotos:Juliana Sepúlveda

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.