Guerra sucia mancha el proceso electoral

El presidente del Centro Empresarial de Mérida (Coparmex), Gustavo Cisneros Buenfil, reconoció que la guerra de lodo (o guerra sucia) no aporta nada a las campañas políticas porque la sociedad lo que quiere es conocer propuestas que conduzcan a la solución de los problemas del país.

–Como ciudadanos debemos de pedirle a los posibles candidatos que las próximas campañas se basen en propuestas que solucionen las problemáticas que las entidades enfrentan. Las propuestas tienen que venir acompañadas de un sustento económico y práctico, es decir, el “cómo” vamos a lograr aterrizar las propuestas y si las mismas cuentan con una viabilidad económica y funcional—dijo.

En reacciones a lo sucedido hace unos días con el video escándalo de una candidata en Veracruz, que aceptó dinero supuestamente para entregar al aspirante a la presidencia de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, y al intercambio de declaraciones en redes sociales entre el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa y Juan José Rodríguez Prats, el líder empresarial yucateco dijo que lo ideal sería conocer de propuestas y no descalificaciones.

En ese sentido lamentó que todavía falta mucho tiempo para las elecciones y ya comienza la guerra sucia, mediante la cual la gente se desalienta y deja de participar con su voto, en vez de escuchar propuestas.

–Las guerras de lodo no aportan nada a los ciudadanos y sólo refuerzan la percepción social de que la mayoría de los políticos y partidos son corruptos. Desvirtúan el proceso electoral al caer en descalificaciones en lugar de propuestas viables—recalcó.

Por ello, afirmó, los ciudadanos tenemos que insistir en que los candidatos nos digan qué proponen y cómo lo van a lograr, ya que nuestro papel es determinar si la propuesta es correcta, viable y de beneficio para la sociedad.

Adelantó que son los mexicanos, basados en las propuestas, los que van a determinar sus juicios sobre el carácter moral de las partes interesadas en competir en cualquier proceso electoral, pues es fundamental que la ciudadanía haga su tarea.

–Tenemos que investigar si los candidatos han cumplido sus anteriores promesas, si han sido congruentes con los principios y valores que han enarbolado y definir de esta forma si cuentan con la credibilidad requerida para poder aspirar a un nuevo puesto de elección popular—recalcó Cisneros Buenfil.- Esteban Cruz Obando

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.