| Tras cumplirse un año del desalojo de don Salvador Euán Chi, hombre de 98 años de edad, originario de Chablekal, por fin, el Instituto de Vivienda del Estado de Yucatán (IVEY) cumplió su promesa: la construcción de una casa que, por cierto, quedará a medias, ya que no contará con todos los acabados. |
El pasado 3 de mayo se cumplió un año de aquel desalojo, donde pobladores se enfrentaron a decenas de antimotines, quienes con gas lacrimógeno, intentaron replegar a los inconformes de aquel acto que causó indignación.
Durante casi un año, el trámite se volvió eterno y burocrático, a pesar de ser el mismo Ivey quien se ofreció a dar atención a esta demanda. Sin contar la cantidad de fotos y abrazos de funcionarios públicos que aprovecharon el momento para quedar bien entre la sociedad.
También, trascendió de muy buena fuente las intenciones de la dependencia estatal de cobrarle la casa a don Salvador, pero su generosidad fue tanta, que de no contar con el recurso, plantearon la posibilidad de que sean las nietas quienes ayuden en la construcción.
Lo último que se supo, hace un mes, fue que un diputado de extracción panista se acercó a la familia para verificar los avances de aquella petición. Ante el atraso, le ofreció la oportunidad de asistir al Congreso para denunciar la burla del que fueron objeto.
Sin embargo, al enterarse el Ivey de las intenciones, actuó enseguida.
-Cuando vimos ya estaban trayendo el material y empezaron a construir. Ni nos avisaron. Lo bueno que ya estaba el terreno. Ya está techada, pero la van dejar sin revocar las paredes del interior -informaron.
-No podemos pedir más, contrabajo cumplieron con su promesa tras casi un año de estar atrás de ellos –añadió uno de los familiares de don Salvador.- Jesús Gómez
