Las estimaciones calculan que para 2050 el cambio climático puede suponer una pérdida del 4% de la economía global
Cómo financiar los proyectos para mitigar el cambio climático, la adaptación a los cambios generados por la emergencia ambiental y las indemnizaciones por los daños causados por esta “amenaza existencial para la humanidad”, serán los temas centrales de la próxima COP27, que se celebrará en noviembre en Egipto.
Así lo indicó en un encuentro telemático con la prensa acreditada para asistir a la conferencia el representante especial de la presidencia de la COP27, Wael Abulmagd, quien insistió además en que la cita girará en torno a la idea de que “ya es hora de pasar de la negociación a la implementación y de las promesas a las acciones sobre el terreno”.
Abulmagd, embajador egipcio en Brasil y negociador de su país en la COP26, recordó que las estimaciones calculan que para 2050 el cambio climático puede suponer una pérdida del 4 % de la economía global, afectando principalmente a los países menos desarrollados, y que cinco millones de personas mueren cada año por temperaturas extremas.
Por ello, aseguró que, seis años después de la firma del Acuerdo de París para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, en los que se han estado negociando sus aspectos operativos, “es hora de cambiar de la negociación a la implementación, de promesas a acciones sobre el terreno”.
Pero implementación también supone, dijo, “implementar las varias promesas y otros compromisos que han sido anunciado por Gobiernos y por otros actores”.
En este sentido hizo referencia al otro eje de la COP27, a celebrarse del 6 al 18 de noviembre en la turística ciudad de Sharm el Sheij, en la costa del mar Rojo, que consistirá en decidir cómo financiar los acuerdos respecto a la mitigación y, sobre todo, adaptación e insistió en que será necesario en este aspecto la participación del sector privado.
“Necesitamos formas creativas para concebir financiación, necesitamos animar al sector privado para que dé un paso adelante e invierta y necesitamos aprobar proyectos que puedan ser apoyados, que puedan atraer los billones de dólares de dinero privado que se quieren invertir en cambio climático”, destacó el diplomático.
Por otra parte, Abulmagd reconoció que la actual guerra en Ucrania tendrá un impacto en la COP27 debido al escenario de confrontación entre bloques que ha provocado y la “animosidad que generará entre los asistentes”, y advirtió ante la posibilidad de que esa tensión se utilice “como pretexto para no cumplir las promesas” de financiación.
Ante esta coyuntura, hizo un llamamiento a las partes para que “pongan sus diferencias aparte” y trabajen con “ambición” y “responsabilidad” para atender una crisis global que afecta “a todo el mundo por igual”.
Hace unos días, el egipcio Mahmud Mohieldin advirtió que más del 60 por ciento de la financiación de las políticas para abordar la emergencia climática mundial proviene de instrumentos de deuda.
Por ello, Mohieldin insistió en que, mientras que la adaptación al cambio climático es responsabilidad fundamentalmente de los presupuestos estatales, en materia de mitigación “se necesita delegar más el liderazgo en el sector privado “bajo el marco regulatorio del sector público y con algo de espacio para las instituciones de financiación al desarrollo”.
Texto y fotos: EFE / Agencias