Bernardino Paz Celis
Desde que se construyó el mercado municipal “20 de noviembre” en 1972, han pasado más de 15 administraciones municipales y no se ha considerado techar su explanada.
Hace más de 19 años en el muro superior de la fachada central del mercado se pintó un mural y la vista frontal de la iglesia en el lado oriente son aparentemente los argumentos que el INAH ha sostenido para que restringir que se construya el techo de la explanada del mercado, para no estropear la imagen del patrimonio cultural. Originalmente la compraventa venta de frutas y verduras se realizaban en la plataforma central.
Conforme han pasando las administraciones, en su mayoría de extracción priista, se han vendido los espacios hasta que el patio de maniobras de vehículos actualmente es utilizado para la venta de frutas donde las familias de los productores venden expuestos bajo el sol y las inclemencias del tiempo.
La actual administración no ha descartado techar el mercado, uno de los que ha lanzado una propuesta de construir un techo del mercado es el que aspira a ser abanderado del PAN, Héctor López Contreras, quien dijo que haría 30 columnas para sostener el techo.
El dilema es: las disposiciones del INAH y falta de ordenamiento de las revendedoras foráneas, quienes han impuesto su ley apropiándose de espacios ante cierta indiferencia de las autoridades que han pasado.
