Una persona perdió el ojo luego de una pelea con uno de sus exempleados, informes indican que eran dos personas que habían llegado a la ciudad en busca de empleos y rentaron una casa en el centro de la ciudad de Mérida.
Tras pasar tiempo ambos sujetos tuvieron un desacuerdo, lo que provocó el despido de uno, sin embargo, seguían viviendo en el mismo hogar.
Ya por la noche la persona que fue despedida entro al predio en estado de ebriedad y al encontrarse con su antiguo jefe comenzaron una discusión derivada de todo lo anterior mencionado.
La pelea subió de intensidad provocando que el exempleado partiera un palo de escoba a la mitad clavándole la punta en el ojo izquierdo a su exjefe