La ciudad de Mérida amaneció ayer 1 de enero semivacía, con un mínimo de vehículos en circulación tras los festejos de la Noche Vieja.
La urbe meridana dio paso al nuevo año casi silente con un mínimo tráfico tras los festejos del 31 de diciembre en casi toda la metrópoli yucateca. Calles y avenidas de la ciudad vieron reducida su operatividad, tras las celebraciones, especialmente en un domingo donde la gran mayoría de la población realizó actividades para recibir 2017.
Con un alto número de comercios cerrados, muy pocos meridanos despertaron temprano para iniciar el nuevo ciclo calendárico, de esta manera las calles, autobuses vacíos y zonas que en otra fecha del año lucen repletas de transeúntes, este domingo amanecieron casi desiertas, significativamente en el primer día del año en Mérida.
El panorama fue similar en el Paseo de Montejo y otras avenidas, así como en la zona de los mercados, parques y colonias de la capital yucateca.
Luego de una intensa actividad comercial de poco más de una semana y de movimiento acelerado de vehículos y personas en torno a la Nochebuena y el Año Nuevo, el domingo resultó muy tranquilo para Mérida.
Sin embargo, destacó el movimiento de turistas extranjeros y nacionales, en el Centro Histórico de la ciudad y basura acumulada en algunos puntos del primer cuadro. El trasporte público brindó servicio desde temprana hora pero con pocas unidades, lo que provocó que algunos pasajeros tuvieran que esperar en las terminales aledañas al Centro Histórico varios minutos más de lo acostumbrado para abordar una unidad que los llevaran a su destino; no obstante, el servicio se fue normalizando en el trascurso de la mañana para alrededor del medio día, laborar de manera regular.
– José Cortazar
