Israel y las milicias de Gaza han entrado en pocas horas en una guerra abierta después de que los grupos armados de la Franja lanzasen a primera hora de ayer un ataque sorpresa sin precedentes, con la infiltración de decenas de hombres armados, secuestros de civiles y soldados y una intensa descarga de cohetes que ha causado ya al menos 250 muertos y más de 1,450 heridos. Se trata de una operación inédita, no solo por su alcance y simbolismo, sino también por el número de hombres armados que ha logrado penetrar en territorio israelí. También de la mayor acción en territorio israelí en décadas, solo equiparable a las producidas en el marco de las sucesivas guerras con sus países vecinos árabes entre 1948 y la del Yom Kipur, en 1973, que muchos recordaron ayer porque el país exhibió la misma debilidad ante un ataque sorpresa coordinado.
El número de muertos es ya un quinto del de toda la Segunda Intifada (2000-2005). Israel confirmó además que las milicias mantienen secuestrados civiles y soldados, que Hamás cifra en decenas. Pasado el shock inicial, el Ejército israelí bombardeó masivamente la Franja, causando 232 muertos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, que ha cifrado en 1,697 los heridos. “Ciudadanos de Israel, estamos en guerra. Y la ganaremos”, aseguró el primer ministro, Benjamín Netanyahu. Las Fuerzas Armadas han declarado el estado de preparación para la guerra y movilizado a miles de reservistas. En un discurso televisado por la tarde, el primer ministro israelí prometió venganza: “Nos vengaremos por este día negro que han infligido en el Estado de Israel y sus ciudadanos”. Netanyahu afirmó luego: “Lo que ha ocurrido hoy nunca se había visto en Israel, y me aseguraré de que no vuelva a ocurrir jamás. Hamás ha empezado una guerra malvada y cruel. Ganaremos, pero el precio será alto”.“Las Fuerzas de Defensa de Israel van a usar, de forma inmediata, todo su poder para desmantelar las capacidades de Hamás”, aseguró también el primer ministro.
En la madrugada de ayer, con el país a medio gas por coincidir la jornada del sabbat y el final de la festividad judía de Sucot, decenas de milicianos palestinos lograron cruzar la ultraprotegida frontera por aire, mar y tierra, según un portavoz militar israelí. Algunos, aprovechando huecos en la barrera fronteriza; otros, abriendo una grieta con una excavadora o sobrevolándola en vehículos atados a parapentes.
Luego han mantenido tiroteos con soldados israelíes en localidades cercanas a la Franja. A última hora del día, los milicianos permanecían atrincherados y con rehenes en varias localidades del sur del país. Videos y fotografías difundidos por medios locales muestran los secuestros de israelíes ―algunos aparentemente sin vida―, en imágenes que parecían impensables apenas 24 horas antes, al tratarse de una barrera fronteriza considerada inexpugnable y vigilada por uno de los ejércitos más avanzados del mundo. El portavoz de las Fuerzas Armadas, Daniel Hagari, no ha especificado el número de secuestrados, aunque Abu Obeida, portavoz de las Brigadas de Ezedín Al Qasam, brazo armado de Hamás, los ha cifrado en decenas, entre ellos “altos cargos y militares”.
Por otro lado, Netanyahu agradeció a los líderes de Estados Unidos -su principal socio-, Francia y Reino Unido por manifestar su apoyo a Israel.
Texto y foto: Agencias