A partir de mañana, debido al constante incremento del costo de los insumos, el alimento se va a vender entre los siete y ocho pesos
Debido al incremento constante de los precios de sus insumos, y en especial del trigo, que en un 25 por ciento viene de Ucrania y Rusia, países que en estos momentos se enfrascan en un conflicto bélico, situación que está afectando directamente en los costos, lo que se reflejará de manera directa en el bolsillo de la ciudadanía que a partir de este lunes pagará siete pesos por una barra de pan francés.
En rueda de prensa celebrada este sábado, un grupo de propietarios de panaderías de Mérida reiteraron que no se trata de que los panaderos o la harinera quieran hacerse más ricos, sino que el alza obedece a una problemática en materia de importación del trigo, que en estos momentos debido a la ley de la oferta y la demanda tiene un costo mayor de lo estimado.
Al respecto, Leticia Pech Gamboa explicó que a los proveedores les avisaron que desde el pasado viernes 10 de marzo, aplica un aumento de 120 pesos y 150 pesos en el costo del saco de harina de 44 kilos, lo que representa un 26 por ciento más. Dependiendo de la marca, ahora pagarán hasta 690 pesos por el producto.
“Hasta enero del 2021, el costo del bulto de harina era de 320 o 330 pesos, y ahora se ha duplicado su precio, mientras que el precio del pan no se ha incrementado en esa proporción, se había mantenido en 4 o 5 pesos, lo mismo que el pan dulce, así es que ahora con estas alzas el precio que alcanzará será de 7 pesos y, posiblemente, 8 pesos”, indicó Perla Andrade, quien detalló que hay panaderías ubicadas en el norte de la ciudad que sin este incremento ya estaban dando las barras de francés en 6.50 pesos, mientras que en el sur, hay lugares en los que se ofrece en 3.50 pesos.
“En estos casos mucho tiene que ver el tamaño, peso y la calidad de los insumos que se utilizan para la elaboración del producto, además del lugar y la condición económica de la clientela, explicó Haydé Campos Medina, quien recalcó que es generalizada el alza de insumos como la manteca, las grasas y los aceites, que en este último caso pasaron de 18 pesos el litro a 35 y hasta 50 pesos el litro dependiendo de la marca, y a esto hay que sumarle el alza en los combustibles.
A todo esto, se sumó la competencia hasta cierto punto desleal que representan las panaderías informales (se calcula que de cada 5 panaderías que existen, tres son clandestinas), que aunque no garantizan que su producto cumpla con todas las normas de higiene, como se revisan en las establecidas, pueden dar más barato su producto porque no pagan impuestos ni tienen que hacer frente a las tarifas de luz, agua, basura comercial. “El llamado es a los duelos de panadería a que evalúen, saquen bien sus costos y actualicen sus precios, porque corren el riesgo de descapitalizarse y quebrar”, advirtió.
En la reunión se explicó que los proveedores les aseguraron a los panaderos que se tiene garantizado el abasto del producto hasta fin de año, no habrá escasez, pero si cambios en el precio, que puede llegar a 700 pesos.
También acudieron a la reunión Jorge Carlos Campos García, Temir Díaz Candila y Rusell Diaz.
Texto y foto: Manuel Pool
