Un grupo de 123 profesionistas señala que les dan algunos cubrebocas, una botellita de alcohol y una bolsa de basura para protegerlos, lo que consideran una burla, ya que en los próximos días se pasará a la fase 3.
Luego de que anteayer, la agrupación “Médicos Pasantes de Servicio Social de Yucatán” enviara un comunicado dirigido a las autoridades de salud pública y a la Universidad Autónoma de Yucatán para dar a conocer la situación que enfrenta este gremio, este no recibió respuesta, por lo que acordó continuar con el cese de actividades.
Los quejosos denunciaron la falta de materiales e insumos, incluso comentaron que en algunas Unidades del IMSS Bienestar y centros de salud del interior del estado no tienen ni luz ni agua, por lo que las condiciones para laborar son muy precarias.
Un estudiante de la Facultad de Medicina de la Uady, quien no quiso proporcionar su nombre por temor a represalias, señaló que al no tener una respuesta de su facultad, han optado por hacerse a un lado, pues no pueden trabajar sin los materiales e insumos especializados para hacer frente a la contingencia sanitaria.
—Nuestra facultad no nos puede apoyar, no puede garantizar que vamos a estar seguros, por lo que hemos decidido continuar con el cese de actividades hasta que no se nos de lo que estamos pidiendo —subrayó.
Dijo que antes de que iniciara esta contingencia en la entidad, los médicos que están realizando su servicio social en los hospitales solicitaron a las autoridades de salud, capacitación, insumos y equipo suficiente para poder protegerse de esta enfermedad, sin embargo no se les dio una respuesta.
—Desde principios de año que la pandemia estaba afectando a China, pedimos a las autoridades de salud batas, gorros, cubrebocas y mascarillas especiales para hacer frente a esta contingencia sanitaria, sin embargo no lo gestionaron a tiempo, por lo que hoy en día ya hay un desabasto de insumos —manifestó.
El quejoso comentó que no se respeta el protocolo de prevención en el personal de salud, que está expuesto a un posible contagio, pues el material que se les está proporcionando no cumple con las normas ni con lineamientos internacionales para hacer frente a esta enfermedad.
Ante estas carencias un grupo de 123 pasantes decidió hace una semana retirarse del sector salud, ya que no puede continuar trabajando bajos esas condiciones, y podían ser un foco de infección para sus familias.
— Nos están dando una bolsa de basura, algunos cubrebocas y una botellita de alcohol para protegernos, lo que consideramos una burla; en próximos días pasaremos a la fase 3, y no se cuentan con los materiales necesarios para que el personal de salud este protegido —expresó.
Otras anomalías figuran que el pago atrasado de las becas, firman contratos que no les corresponde y no les dan viáticos.
Texto y foto: Georgina Bacelis
