Especialista da una serie de recomendaciones para solucionar el problema en esa zona de la ciudad
El Anillo Periférico de Mérida se ha convertido en una vía mortal, pues en lo que va del año han muerto más de 30 personas, como consecuencia de las lesiones que sufrieron en accidentes de tránsito ocurridos en esa vía, señaló el Ingeniero de Tránsito y Auditor en Seguridad Vial René Flores Ayora.
Comentó que son pocas las personas que respetan los límites de velocidad de esa vía, a pesar de que el carril derecho es de 89 kilómetros por hora, mientras que el central y el izquierdo son de 90.
“El año pasado hubo al menos 230 personas fallecidas por accidentes viales, de las cuales 32 ocurrieron en el periférico, y del total de muerto el 50% eran motociclistas” manifestó.
Destacó que el periférico de Mérida es una vía de acceso controlado, eso quiere decir que solo se puede accesar a él en ciertos puntos controlados, por lo que se necesita que esta sea una vía que salve vidas.
Resaltó que es necesario aplicar la Visión Cero, es decir que la movilidad peatonal esté por encima de la movilidad vehicular, y que la autoridad federal, estatal o municipal, tengan injerencia en las muertes por los siniestros viales.
En ese sentido, Flores Ayora envió una carta al gobernador Mauricio Vila, con algunas recomendaciones de bajo y mediano costo para solucionar este problema que se genera en esta zona de Mérida, donde se han originado muchas muertes.
Como punto número uno recomienda disminuir la Velocidad de 90 km/hora a 80 km/hora, colocar defensas metálicas de 2 o 3 ondas, para que los vehículos no se vayan a la hondonada, ni se estrellen contra los árboles y postes de Luz.
Cambiar la cimentación de los postes de luz, es decir, instalar postes colapsables, situar trafitambos o vallas con agua en los muros y columnas de los pasos a desnivel y en los muros para amortiguar el Impacto, repavimentar el periférico, terminar las calles laterales, poner pantallas de mensaje Variable, así como realizar un protocolo de vialidad para el Periférico.
También sugiere poner patrullas entre 2 a 5 kilómetros por hora, llevar a cabo una campaña emocional objetiva de seguridad vial, tolerancia cero a la velocidad, y una ingeniería de tránsito entre los entrecruzamientos, entras y salidas del periférico.
Asimismo, es necesario el mantenimiento de los pasos peatonales elevados, mayor Inspección y Vigilancia Policial y, por último, la instalación de radares de velocidad.
El ingeniero de tránsito y auditor de seguridad vial, consideró que no es necesario consultar la opinión de expertos internacionales y nacionales, ya que en Yucatán se cuenta con especialistas y profesionistas que conocen del tema, y que solo busca el bien común, prevenir las muertes ocasionadas por los siniestros de tránsito.
Texto de Georgina Bacelis
