Personas no casadas tienen mayor riesgo de sufrir síntomas depresivos

Hay solteros que piensan que este estilo de vida los mantiene menos presionados económicamente y que les dará estabilidad emocional, pero un estudio realizado por una universidad china arrojó resultados contrarios.

Las personas no casadas tienen 80% más de probabilidades de sufrir síntomas depresivos que las casadas, un riesgo que es mayor entre varones y gente con mayor nivel educativo.

La investigación encabezada por la Universidad de Macao (China) analizó datos de más de 100 mil personas de siete países, como Estados Unidos, Reino Unido, México, Irlanda, Corea del Sur, China e Indonesia, para investigar el riesgo de síntomas depresivos entre casados y no casados, como lo son solteros, divorciados o separados, así como viudos.

La soltería se asoció con 79% más de riesgo de síntomas depresivos que el matrimonio; los divorciados o separados tienen 99 por ciento más de riesgo y los viudos un 64 por ciento más. Los participantes solteros de los países occidentales (Estados Unidos, Reino Unido e Irlanda) tenían un mayor riesgo de depresión que sus homólogos de los países orientales (Corea del Sur, China e Indonesia).

Alcohol y tabaco

Además, el estudio reveló que el consumo de alcohol desempeñó “un importante papel mediador” en la asociación entre el estado civil y el riesgo posterior de desarrollar síntomas depresivos en los individuos viudos, divorciados, separados y solteros de China, Corea y

México. El tabaquismo también medió causalmente en el aumento de riesgo entre los participantes chinos y mexicanos solteros, escriben los investigadores.

El equipo sugiere que las tasas más bajas de depresión entre las parejas casadas podrían deberse al intercambio de apoyo social dentro de la pareja, al mejor acceso a los recursos económicos y a la influencia positiva en el bienestar del otro, resumió la publicación.

Dos de las limitaciones del estudio es que los datos se recogieron mediante cuestionarios de autoinforme y no a partir de diagnósticos clínicos de depresión, y que todas las parejas analizadas eran heterosexuales.