Alrededor de 120 vecinos de los fraccionamientos del Arco y Vista Alegre realizan una marcha porque ejidatarios reclaman pagos por los terrenos; los manifestantes dicen que son propietarios
UN GRUPO de vecinos del fraccionamiento del Arco y Vista Alegre marchó contra la “mafia agraria” que amenaza con despojarles sus propiedades al norponiente de Mérida en caso de no pagar una indemnización a ejidatarios de Chuburná que reclaman la tierra donde se ubican los predios.
La protesta, compuesta por unos 120 colonos, partió desde la calle 20 con Avenida Correa Rachó y terminó en el Monumento a las Haciendas, en la zona de Altabrisa.
Con pancartas con consignas como “¡Queremos justicia y respeto a la propiedad privada!”, chicos y grandes iniciaron la protesta poco después de las nueve de la mañana.
Russell Santos Morales, vocero del movimiento, afirmó que están dispuestos a defender su derecho a estar en paz, mantener su tranquilidad y su calidad de vida y reiteró que las propiedades fueron adquiridas de manera legal y con esfuerzo.
En entrevista agregó que en caso de no pagarles y que se demostrase que efectivamente es del ejido de Chuburná, las propiedades podrán ser rematadas por los campesinos para cobrar la supuesta indemnización. Sin embargo, aseguró que los vecinos que cuentan con los títulos de propiedad vigentes desde 1929, año en que le fueron adquiridos los terrenos a un particular.
Los inconformes externaron que estos conflictos han venido a romper la tranquilidad de los vecinos del fraccionamiento y la colonia antes citados, donde mayormente viven jubilados o pensionados cuyos ingresos no rebasan los ocho mil pesos al mes.
De igual manera, se informó entre los afectados hay quienes que han dejado herencias a sus familiares, pero se sienten agraviados por las presiones que está realizando Rebeca Buenfil Méndez, representante legal de los ejidatarios de Chuburná.
Finalmente, consideraron que esto se trata de una acción injusta de la “mafia” inmobiliaria integrada por abogados y exfuncionarios que los quieren despojar de sus propiedades.
Texto y fotos: ACOM
