La ganadora de las Olimpiadas del Conocimiento, además de viajar a la capital del país, visitar Los Pinos y convivir con el presidente Enrique Peña Nieto, recibe un reconocimiento por parte de la Segey
En el anterior curso lectivo, la alumna de la primaria “William Kilpatrick”, Alexandra Rivera, entonces estudiante del sexto grado, se ganó el derecho de representar a las escuelas particulares en las Olimpiadas del Conocimiento, donde ganó el primer premio. A manera de reconocimiento, la joven viajó a la capital del país donde visitó Los Pinos y convivió con el presidente Enrique Peña Nieto.
-Sin duda fue una gran experiencia que se quedó en su corazón, y ahora a esta distinción se suma el que la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado, a través de su dirección de educación primaria, le hace mediante la entrega del reconocimiento respectivo a esta joven que ahora cursa el primer año de secundaria -dijo la maestra Blanquita Brito y Alonzo.
Al término de la ceremonia se llevó a cabo la develación de una placa en la que quedó patente de este logro académico, en la que además de la constancia y perseverancia en el estudio de la joven Alexandra, también se reconoce el apoyo de su maestra Claudia Canché Pantí.
-Como maestro sé de la dedicación que la escuela le da la educación de los alumnos, es por eso que entrego estos reconocimientos a la alumna Alexandra Rivera, quien obtuvo el primer lugar de todas las escuelas particulares del estado, a la escuela William Kilpatrick y a la maestra Claudia Canché Pantí -dijo durante la ceremonia Jorge Eduardo Cabrera Ucán, inspector de zona, quien también agradeció a todos los padres de familia el apoyo que brindan a sus hijos para ayudarles en sus labores y obtener este tipo de logros.
-Es un orgullo siempre contar con maestros comprometidos y entregados a su labor como la maestra Claudia, que ahora ha obtenido ya la recompensa a su esfuerzo académico como docente, porque hay que decirlo, no es fácil trabajar con los niños para que adquieran todas las habilidades y aprendizajes -señaló en la sencilla pero emotiva ceremonia la maestra Elda María Gómez González.
