Elementos de la Policía Estatal, al mando del subsecretario Emilio Zacarías Laynes, intervinieron para poner orden y garantizar la seguridad de taxistas y pasajeros, quienes se vieron amenazados por integrantes del sindicato Francisco I. Madero de Chemax.
El problema estalló la mañana de ayer, cuando los integrantes del citado sindicato evidenciaron su inconformidad al ser reubicados por la Dirección de Transporte Público, ya que no quieren acatar las indicaciones de la dependencia.
Los taxistas inconformes desataron una ola de violencia en contra de otras unidades foráneas, posteriormente fueron a la comisaría de Tikuch, para atacar a los ruleteros que no son de su sindicato.
El problema se suscitó con el cambio de paradero de taxis de Chemax pertenecientes a la cooperativa “Francisco I. Madero” (taxis verdes) y el Sindicato de Taxistas “Miguel Hidalgo y Costilla” (grises).
Los inconformes fueron removidos de su antiguo paradero del barrio de Santa Ana de Valladolid y los trasladaron al Centro de esa ciudad, en un espacio que ocupó la antigua agencia Ford y por el cual tienen que pagar 40 mil pesos al mes.
Los taxistas reubicados están molestos porque, además del pago que tienen que hacer, sospechan que el traslado fue para dejarles el campo libre a los choferes del sindicato “Adalberto Aguilar Osorio”, sección Chemax (azul), que prestan servicio entre ese municipio y Valladolid.
Tras ver que no les convenía el nuevo paradero, algunos taxis verdes y grises regresaron a la zona del barrio de Santa Ana, lo que propició que los azules fueran a bloquear con sus autos los accesos en el nuevo paradero.
Por lo que fue necesaria la intervención de las autoridades para controlar a los ruleteros.
Texto y foto: Edmundo Hernández
