DESDE LA SEMANA pasada ya empezaba a perfilarse el poco interés de la ciudadanía en apoyar el desarrollo del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA). El diputado Manuel Díaz, en declaraciones que incluimos en la página 6, confirma que hay muy poco interés de ciudadanos y organizaciones por impulsar ese sistema, como lo evidencia el hecho de que nadie ha registrado ante el Congreso del Estado propuesta alguna para integrar el comité de selección que debe definir a los integrantes del Comité Ciudadano del SEA. Eso es muy preocupante porque implica muchas cosas negativas. Si esa actitud continúa, o mejora muy poco, dudoso futuro tendrá el citado sistema, cuyos integrantes deben ser ejemplo de participación cívica, de vigilancia sobre los integrantes de los tres Poderes, y de transparencia de cara a la sociedad. Ojalá podamos superar la “antieducación” que durante décadas hemos recibido, debido a la cual no sabemos defender nuestros derechos ni protestar clara y oportunamente cuando sea necesario y/o conveniente.
OTRA VEZ NO SE midió la revista “Desde la fe”, que auspicia la Arquidiócesis de México, pues en su editorial principal de esta semana señaló con dureza a la clase política, a la cual exhortó a suprimir “privilegios, prebendas, lujos y excesos de burocracia en los tres órdenes de gobierno, para evitar despertar el odio del pueblo tras el sismo del pasado 19 de septiembre”. Los mexicanos, aseveró, “estamos hartos de los excesos del poder público y político, de la corrupción, del derroche escandaloso en sueldos, prebendas y frivolidades de los tres Poderes de la Unión, de la ostentación de políticos que insultan a los más de 50 millones de pobres que viven en nuestra atribulada patria, de la impunidad de la que vergonzosamente ocupamos el cuarto lugar mundial, del cinismo y desprecio de la clase política que sabe cómo burlar las leyes”. ¿Con qué parte de ese señalamiento no estaría de acuerdo, estimado lector? A nuestro parecer “Desde la fe” sólo se hace eco de la desconfianza que permea sobre cada vez más ciudadanos, y que debería preocupamos a todos porque pone en riesgo cualquier proyecto de nación que tengamos.
