Falta de conciencia y desinformación sobre el tema, señala especialista
A pesar de la importancia que tiene el manglar por los múltiples beneficios que genera al medio ambiente, en Yucatán continúa su destrucción y sigue el relleno de espacios de agua asociados a este ecosistema, que se ubica en el límite entre la tierra y el mar y que contribuye al bienestar, la seguridad alimentaria y a la protección de las comunidades costeras.
En el marco del Día Internacional de Conservación del Ecosistema Manglar, Peninsular Punto Medio contactó vía telefónica al investigador titular del Cinvestav Unidad Mérida, Jorge Herrera Silveira, quien interrumpió brevemente su participación en un congreso sobre manglares que se celebra en Inglaterra, para hacer un análisis sobre la situación por la que actualmente atraviesa este ecosistema, no solo en Yucatán, sino en toda la península.
En este sentido recordó que México ocupa el cuarto lugar a nivel mundial en cuanto a la extensión de manglares que posee, mientras que Yucatán ocupa el tercer sitio en el solamente detrás de Quintana Roo y Campeche, es decir, que en la Península se concentra el 60% del manglar de todo el país.
“Yucatán tiene alrededor de 90,000 y 100,000 hectáreas de manglar en estado de conservación, pero también 40,000 hectáreas o más en estado degradado, por lo que es de los estados que probablemente tiene más hectáreas de manglar degradado después de Quintana Roo, donde, por el cambio de uso de suelo por hoteles, principalmente en el área de la Riviera Maya y ahora Costa Maya, probablemente hayan sido degradadas alrededor de 100,000 hectáreas”, indicó.
“El peor enemigo del manglar es el hombre, principalmente en temas de cambios de usos de suelo, pues se están autorizando construcciones cerca o alrededor de las áreas de manglares. Como ejemplo está un desarrollo habitacional que está yendo hacia Chuburná Puerto, es un área que está deforestando, que está compactando y que va a afectar el acuífero del cual depende una gran área de manglar”, advirtió Herrera Silveira, reconocido por su labor de más de 20 años en el estudio, restauración y conservación de estos ecosistemas.
“De hecho, recientemente nos invitaron para un proyecto de la Unesco para restauración de manglar en siete reservas de la biosfera. Vamos a asesorar a la Unesco, ahora estamos en Inglaterra en un evento de créditos de carbono y créditos de biodiversidad, ya que los manglares son de los ecosistemas que más carbono capturan y hay un interés muy grande de empresas muy grandes para compensar sus emisiones a través de la conservación y restauración de manglar”, explicó.
“Los manglares son un hábitat para peces, crustáceos y aves, protegen de manera natural a la costa contra las mareas de tormenta, los tsunamis, el aumento del nivel del mar y la erosión; son parte esencial para la conservación del sistema acuífero, pero también el suelo de este ecosistema almacena hasta 5 veces más carbono que otros ecosistemas, siendo así una solución contra el cambio climático”, detalló el investigador, quien destacó que, a pesar de esta situación, más de tres cuartas partes de los manglares del mundo están amenazados y todos los organismos que dependen de ellos.
“Definitivamente, el yucateco y el público en general no tiene conciencia de la importancia del manglar, la mayor parte de las personas que viven en ciudades y que de alguna manera van a la costa, no saben que gran parte de ese disfrute se debe gracias al manglar, en temas como por ejemplo de la calidad del agua, la protección de las tormentas y que son los manglares sitios de guardería de las especies de importancia comercial”, dijo Herrera Silveira, quien consideró que se requiere de una política o una estrategia de difusión agresiva en los medios para que las personas sepan la importancia que tienen los manglares para todos.
En este sentido, manifestó que lo primero que se tiene que hacer para conservar los manglares es aplicar las leyes y las normas que los protegen, así es que debe quedar claro que en los ecosistemas de manglar y los alrededores, o cualquier área que lo impacte, no se pueden construir carreteras, ni modificar los flujos hidrológicos, así como tampoco se puede hacer cambio de uso de suelo.
“Hay que respetar la normatividad que existe y poner más atención en temas de vigilancia; desafortunadamente, es una realidad que se sigue talando manglar. De hecho, recientemente interpuse una denuncia ante la Profepa por tala de manglares en Celestún, y, por otra parte, se siguen rellenando áreas de manglar o cuerpos de agua asociados al manglar”, señaló el entrevistado, quien recalcó que en Dzilam de Bravo hay varios ejemplos.
“Están rellenado cuerpos de agua con lo cual van a impactar en un mediano corto mediano plazo los manglares que están asociados a ellos, entonces digamos que estamos estancados o yendo un poco para atrás en estos temas de la conservación de los manglares en el estado de Yucatán”, indicó.
Por ello, el Dr. Herrera manifestó que se debe considerar la tala, depredación o degradación del manglar como delito grave y que amerite cárcel. En el caso de quienes necesitan el uso de manglar como, por ejemplo, las comunidades que cuando viene la época de pulpo talan el manglar blanco para las jimbas en la pesca de pulpo; establecer la manera de pasar de la tala clandestina a un manejo forestal para seleccionar áreas específicas de aprovechamiento, como ya es posible en otros estados como Tabasco, Veracruz y Nayarit.
Falta de conocimiento
El especialista aseguró que otro enemigo a vencer es la falta de conocimiento, ya que hay organizaciones que tienen muy buenas intenciones en cuanto a la conservación y la restauración de los manglares, pero que se están asociando a grupos u organizaciones que no tienen la experiencia, herramientas ni el conocimiento para esas actividades, es decir, intermediarios que incluso han hecho malas prácticas y que han engañando incluso a las comunidades, principalmente de ejidatarios.
“Nosotros (el Laboratorio de Producción Primaria), que tenemos la experiencia, nos hemos ganado una buena reputación, de hecho nos invitan a Guatemala, El Salvador, Panamá y Colombia para asesorarlos en la restauración de manglares, sin embargo, en México estas organizaciones nuevas que llegaron a la Península de Yucatán hace poco no se asocian con nosotros, invitan a otros grupos que no tienen experiencia y entonces vamos a cometer los errores que se hicieron en los años 90, ese es otro enemigo porque, en vez de ayudar a que el manglar se conserve y restaure, vamos a ir para atrás nuevamente”, advirtió.
Cabe destacar que, a través del Laboratorio de Producción Primaria, que está a cargo del doctor Herrera en colaboración con la doctora Claudia Teutli, de la ciudad de Mérida, se ha conformado el grupo más reconocido a nivel nacional en temas de restauración y carbono azul.
Esto ha permitido la colaboración e invitación de diversas instituciones nacionales como Semarnat, Conanp, Inecc y de gobiernos de los estados, así como de organismos internacionales como Unesco, WWF, TNC, The Ocean Foundation, MarFund, entre otras, y próximamente de países como Guatemala, El Salvador y Panamá.
Texto y fotos: Manuel Pool