Moscú lamenta profundamente los planes de Kiev y los califica como un paso destructivo tendente a la ruptura de las relaciones bilaterales
El Presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, firmó ayer un decreto por el que Ucrania comunicará oficialmente a Moscú su deseo de poner término al tratado de amistad y cooperación con Rusia, decisión que en la capital rusa se recibió como un “paso destructivo” tendente a la ruptura de las relaciones bilaterales.
Según la web presidencial, el Ministerio de Exteriores de Ucrania informará a Rusia sobre la intención de no prolongar el tratado antes del próximo día 30, pues de lo contrario sería prorrogado automáticamente.
Además, la Cancillería ucraniana debe presentar a Poroshenko un proyecto de ley sobre la denuncia del acuerdo, firmado en 1997. En virtud del artículo 40 del tratado, su duración se prolonga automáticamente cada diez años si las partes firmantes no expresan lo contrario seis meses antes de que expire su vigor.
Además de informar a Rusia, Kiev debe comunicar la negativa de prolongar el tratado con Moscú a la ONU, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa y a otras organizaciones internacionales.
Moscú, por su parte, no tardó en lamentar “profundamente” los planes de Kiev que calificó de un “paso destructivo”.
“En un intento de servir a intereses geopolíticos ajenos y a ambiciones políticas propias, las autoridades ucranianas están dispuestas a destruir con facilidad lo que fue construido durante decenios, de romper lazos que durante siglos forjaron varias generaciones de nuestros antepasados”, declaró en un comunicado la Cancillería rusa.
La nota agrega que, de acuerdo a los términos del tratado, tras la recepción de la notificación oficial de Ucrania, este perderá su vigencia el 1 de abril de 2019.
Mientras, en Kiev ya adelantaron la intención de revisar toda la base legal de la cooperación con Rusia, incluido el acuerdo sobre la cooperación en aguas del mar de Ázov y en el estrecho de Kerch, firmado en 2003.
Texto y foto: EFE
