Carlos Hornelas
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Cada 28 de enero se conmemora el día internacional de la Protección de Datos personales, a propósito de la firma del convenio 108 del Consejo Europeo que buscaba dar seguridad con respecto al tratamiento automatizado de datos de usuariosde carácter personal
Este día tiene como objetivo concienciar a autoridades instituciones usuarios y ciudadanos digitales sobre la importancia irrenunciable de su derecho a la privacidad.
Durante la temporada de encierro que tuvimos a propósito de la pandemia el uso de internet así como de diversas plataformas digitales con las cuales interactuamos todos los días se incrementó exponencialmente. Pero también se incrementó el número de amenazas y de riesgos a los usuarios de estos servicios en línea.
Si bien es cierto que pudimos adaptarnos a las clases a través de las videoconferencias o a solicitar las diversas plataformas nuestras compras de súper, también lo es que, aquellos negocios qué se montaron sobre la infraestructura de internet, tuvieron grandes ganancias, aunque en algunos casos, acosta de la privacidad de los usuarios.
La Unión Europea, que se ha tomado este tema muy en serio emitió sanciones récord en el 2021 a empresas como Amazon, Google o Facebook.
Algunos países como Luxemburgo, Irlanda o Francia han encontrado en estas sanciones pecuniarias una fuente importante de ingresos para el Estado. Irlanda multó a Meta, la compañía de Mark Zuckerberg por 267 millones de dólares debido a la falta de transparencia de cómo comparte información con otras plataformas sin enterar a los usuarios.
Francia Por su parte impuso multas, a Google, or 170 millones de dólares y a Facebook por 68 millones de dólares, respectivamente, por no respetar las reglas europeas con respecto al consentimiento de habilitación de cookies en la navegación a través de internet por este país.
Lo interesante del tema es que, si las multas alcanzan esas cantidades estratosféricas, uno puede imaginarse que las ganancias obtenidas por estas empresas pueden multiplicarse al menos por siete. Lo cual da una idea acerca del valor de los datos personales que circulan en el mercado. pero que además todo parece indicar que con el paso del tiempo incrementarán su valor y el uso estratégico en todos los ámbitos de la vida social: desde la mercadotecnia hasta la política, la educación, la conformación de planes y programas asistenciales o de políticas públicas, entre otros.
Simplemente en México, donde para ser francos, esta legislación no ha sido de estricta observancia ni las autoridades le han dado el peso específico con relación a la afectación que pudiera tener los usuarios, el INAI impuso multas por 32 millones de pesos a personas físicas y Morales que infringieron La Ley Federal de Protección de Datos personales en posesión de los particulares, y es de llamar la atención que los sectores más sancionados fueron aquellos que manejan servicios financieros y de seguros, en segundo lugar aquellos que se dedican a manejar la información en medios masivos, y en tercer lugar aquellos comercios al por menor.
Hoy en día los datos personales constituyen una verdadera mina de oro para cualquier empresa. pero también representan un reto gigantesco en la consolidación de sistemas de seguridad que realmente protejan los datos de los ciudadanos. Siendo nuestros grandes secretos parecen estar a merced de una cerradura de cartón a través de la cual cualquiera puede otear hacia el interior de nuestras vidas.
