Si bien el principal reto es reconocer que el ámbito penal no es suficiente para combatir la corrupción, existen otros que son necesarios: una policía especializada que permita actuar con apego a la legalidad, así como un presupuesto idóneo para operar de manera autónoma, expuso vicefiscal anticorrupción, José Enrique Goff Ailloud.
Lo anterior durante su participación en la mesa panel “Acciones y Propuestas Anticorrupción”, en el marco del Día Internacional contra este problema que se conmemora este 9 de diciembre.
El “zar anticorrupción” compartió que esta acción es la diferencia entre contar o no contar con calles bien construidas y en buen estado; de contar o no, con hospitales bien equipados que garantices el derecho a la salud y a la vida.
—La corrupción, como cualquier otro delito, no se van acabar, pero sí hay que combatirla. Hay que hacerle frente a esta problemática —expuso al señalar que la prisión no es la única medida, ni necesariamente la más adecuada para atacarla.
—Hoy vemos estados donde tienen diversos procesos penales contra ex servidores públicos y los actuales repiten exactamente los mismos o peor, los hechos —indicó.
Ante el avance de esta problemática, planteó la necesidad de crear nuevos instrumentos para su ataque, como: Adquisición de una Ley de Arrendamientos y Prestaciones de Servicios Públicos para el Estado, una Plataforma Nacional Digital, Plataforma Nacional Anticorrupción, así como el involucramiento de la iniciativa privada.
—Es necesario cambiar de fondo los mecanismos que existen de control, eficacia y eficiencia del gasto público y para eso, necesitamos que se involucre toda la sociedad en su conjunto, que no permitan que se repitan estos malos manejos en la administración pública —apuntó.
También consideró necesario que se desmitifique a la corrupción como un factor cultural. —Siempre pensamos que todos los mexicanos son corruptos, que el que no tranza, no avanza, que la corrupción está en los partidos políticos, servidores públicos… la corrupción está en las personas —señaló.
Pero de todos los retos que existen, hay dos importantes para la operatividad de la Vicefiscalía. Uno de ellos es contar cuerpos policiales y periciales especializados en este tipo de delitos, ya que hoy se carece de estos.
—Resulta necesario que la vicefiscalía especializada en combate a la corrupción cuente con una policía especializada para la investigación de estos delitos, que permita realizar con todo apego a la legalidad las técnicas especiales de investigación, como son entregas vigiladas, operaciones encubiertas, intervención de comunicaciones entre particulares y servidores públicos, aseguramiento de bienes y cuentas bancarias”.
También, se requiere un presupuesto que les permita operar de manera autónoma, con total independencia.
Acciones
A pesar de las carencias, en lo que va del año se realizado más de mil actos de investigación, recuperado y reintegrado al erario público, a través de los diversos mecanismos, un millón 161 mil 506, pesos y recuperado 300 bienes inmuebles, entre ellos tres automóviles y una motocicleta.
De igual forma, se han asegurado 19 bienes, resuelto 54 asuntos y actualmente se están integrando 132 carpetas de investigación, así como cuatro acciones penales.
Incómoda transparencia
Por su parte, el comisionado ciudadano de transparencia del Instituto Estatal de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales (Inaip Yucatán), Aldrin Martín Briceño Conrado, comentó que la transparencia no ha sido cómoda a lo largo de estos 15 años para el servicio público. —Nos hemos acostumbrado a ella, pero no ha sido cómoda —dijo.
En su participación aprovechó para citar Alonso Lujambio recordando que la transparencia será la revolución silenciosa del servicio público, “y al paso de los años lo ha sido. Ha sido una transformación donde se ha generado mayor trabajo”.
Texto: Jesús Gómez
Fotos: Cortesía
