Con la participación de maestros de todo el estado, se llevó a cabo este sábado el “Primer Simposio en Investigación Aplicada para Estudiantes de Posgrado”, en el que el investigador de la Southeastern University of Miami, Ramón Ferreiro Gravié, destacó la necesidad de que el país invierta más en la ciencia y la investigación.
-Los grandes países, los más desarrollados, tienen una fuerza muy grande para producir conocimiento, el maestro debe ser un investigador en su práctica y que plantee proyectos educativos que formen al ciudadano virtuoso que el siglo XXI requiere -subrayó el también especialista en neurociencias, quien afirmó que el docente que hace investigación es creador de propuestas para contribuir al desarrollo de la educación y por lo tanto de la sociedad.
Por su parte, la directora del Instituto de Investigación en Ciencias de la Educación, la Dra. Teresita Díaz Domínguez, consideró que el modelo educativo mexicano promueve la investigación, pero que hace falta estimular el tema de hacer visibles los resultados de innovación que tienen los docentes.
Resaltó que el maestro, aunque no lo hace de manera consciente, día a día está investigando, pero por lo general no comparte sus buenas prácticas con sus colegas, ni las documenta.
-No hay que ver solo los aspectos negativos, sino valorar que México es referente para América Latina en materia de Educación, y en el caso de Yucatán es una de las regiones en las que se ha avanzado mucho en el tema, en comparación con otras regiones, aquí se trabaja mucho en pro de la calidad educativa -indicó la también directora de Posgrado de la Universidad Santander.
Recalcó que el docente tiene en sus manos la formación de las nuevas generaciones, y por lo tanto tiene que hacer su labor con mucho amor y dedicación.
-No debe ver su trabajo como algo burocrático, sino buscar la manera que el estudiante se sienta bien en el alma y que sea feliz, solo así se logran los grandes cambios -subrayó la especialista.
Finalmente dijo que independientemente de los modelos de educación y de las normas que al respecto se estructuren, el maestro no puede perder su naturaleza de formar, ayudar, transformar y acompañar al educando.
Texto y foto: Manuel Pool
