En Yucatán existen leyes consideras de vanguardia en la materia, pero las autoridades autoridades no las aplican adecuadamente o funcionan poco porque son muy ambiguas, por lo que el maltrato y la sobrepoblación no disminuye, sugieren expertos; otros analistas no ven con buenos ojos tantas leyes, pues eso perjudicaría al ramo tarde o temprano
Con iniciativas de ley que se elaboran sin analizar cuáles son las consecuencias a futuro, los partidos toman como botín político causas como el bienestar animal, que pasa a segundo término, como ocurrió con la prohibición de animales en los circos que terminó ocasionando que muchos de ellos terminarán abandonados a su suerte o muertos, para aprovechar sus pieles.
Y mientras en estos momentos se analiza en el Senado la iniciativa de la Ley General de Bienestar Animal, que a principios de noviembre presentó el senador Ricardo Monreal acompañado de activistas entre los que figuraba hasta el popular Marco Antonio de Regil, la crueldad contra los animales es cada vez más extrema y las sanciones a los responsables brillan por su ausencia.
Al respecto la catedrática de la Universidad Autónoma de Yucatán y entusiasta protectora de animales, Rocío Quintal, subraya que el problema no son las leyes, pues en Yucatán existen leyes consideradas de vanguardia en la materia, pero las autoridades encargadas de su aplicación no han estado a la altura.
A manera de ejemplo citó el conocido caso del zoofílico de Tekax, quien a la fecha no ha recibido la sanción debida, mientras que en total impunidad en los tianguis se venden sin la debida regulación todo tipo de animales, que se reproducen sin control en casas o criaderos clandestinos, cuyos encargados hasta se roban perros de raza para tal fin y cuando ya no pueden tener más cachorros los tiran a la calle.
Perrita con chapapote
“Y hay ejemplos peores como el de gatos a los que les sacan los ojos, o que terminan siendo sacrificados en rituales satánicos como ocurrió en Progreso, o perros que son apuñalados o que son víctimas de gente cruel que como en el caso de una perrita que rescataron la semana pasada, a la que bañaron con chapapote y le quemaron la piel”, dijo la entrevistada, quien lamentó que todos estos actos queden en la impunidad a causa de la resistencia de las autoridades a aplicar sanciones en casos de maltrato animal.
“Hemos luchado por años por tener leyes de vanguardia, pero los funcionarios encargados de aplicarlas de manera insensible y negligente echan todo a la borda al no aplicarlas, mientras que también hemos vivido en muchas ocasiones experiencias con candidatos que en época electoral se acercan a ofrecer apoyo para que se cumpla con la aplicación al cien por ciento y se apliquen sanciones, pero al convertirse en autoridades se olvidan de todo”, indicó la catedrática, quien respecto a la iniciativa de Ley General de Bienestar Animal, considera es una oportunidad para reivindicarnos como país en el tema.
Muchas leyes, pero…
Al presentar la iniciativa, el senador Monreal Avila recalcó que en México existen muchas leyes para proteger a los animales, pero funcionan poco, porque todas son diferentes y aún quedan cortas, por lo que el maltrato y sobrepoblación no disminuyen, y que a nivel federal también existen leyes sobre los animales, pero todas ellas buscan cómo aprovecharlos mejor para nuestro beneficio y nunca buscan protegerlos
En este sentido, con esta iniciativa, que consta de 57 artículos, se busca reformar y agregar aspectos de la Ley Federal de Sanidad Animal, la Ley General de Vida Silvestre, la Ley Federal de Protección a la Propiedad Industrial, la Ley de Aviación Civil, el Código Penal Federal y el Código Nacional de Procedimientos Penales, para adecuarlos a la Ley General en de Bienestar Animal.
En dicha iniciativa se amplía la gama de conceptos como el de “animal de compañía”, “animal destinado para consumo” y “animal en trabajo”, con la finalidad de diferenciar las relaciones humano-animal y, por ende, la competencia de las autoridades.
Iniciativa no fundamentada
Al respecto, el presidente de la Sociedad Yucateca de Médicos Veterinarios Clínicos en Mascotas, Noé Hernández Cruz, considera que, aunque hay varios puntos en los que coincide con la iniciativa, como el de prohibir cortes de orejas y cola con fines estéticos, de manera general, dice, no está bien fundamentada.
“No dicen cómo se va a hacer, no creo que sea funcional, se tiene que seguir trabajando pensando en que su aplicación sea de manera gradual iniciando con la parte de los animales de compañía y luego seguir con los de consumo, dijo a Peninsular Punto Medio el también propietario de la Clínica Veterinaria El Arca de Noé, quien hace unas interesantes observaciones respecto.
“Hay animales como el caballo que caen en los tres grupos, es decir, puede ser un animal de compañía, de trabajo y existen lugares en los que por su alto contenido proteico y más barata se consume, ¿entonces, cómo se va a diferenciar entre uno y otro?”, se pregunta Hernández Cruz.
Con la legislación vigente el dueño de la mascota responde por los daños que ésta ocasione, pero al cambiar al término de ser vivo, se podría argumentar que respondió por instinto y al no tener propietario por no ser una cosa sino un ser vivo, se van a generar muchos problemas, por lo que consideró que se requiere mucho tiempo para hacer el análisis previo.
Y aunque la Ley General de Bienestar Animal ayudará mucho a que mejoren las condiciones de higiene y la manera en la que se hace el sacrificio en los rastros, esto representará un costo adicional lo que va a repercutir en la economía familiar.
¿Cierre de zoológicos?
Uno de los puntos propuestos y que ha generado mucha controversia es el relativo a la desaparición de los zoológicos y su reemplazó por otras figuras como Unidades de Rehabilitación y Reubicación de Animales Exóticos y Silvestres.
Esto ocasionó que de inmediato la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM), mandó una carta al Senado señalando que “Resulta alarmante que se plantee que únicamente se podrán reproducir animales silvestres cuando se trate de especies en peligro de extinción y exclusivamente para realizar su reintroducción al medio natural”.
Tal planteamiento no contempla el hecho de que los zoológicos no sólo centran sus esfuerzos en aquellos animales en peligro de extinción, sino en todas y cada una de las especies que lo habitan, por lo que subrayan que las restricciones que plantea la iniciativa provocarán “un aumento exponencial en la venta ilegal y el tráfico de animales”.
¿Qué más establece la Ley?
Se establecen penas de hasta 6 años de cárcel para los maltratadores de animales, a nivel nacional.
Además, se plantea dejar de considerar secreto industrial la información sobre las condiciones de los animales en las empresas que lucran con ellos y que también en los aviones, los animales de compañía deberán ser transportados en las cabinas de pasajeros.
Asimismo, en la iniciativa de ley se sugiere el establecimiento de Centros de Conservación de Fauna Endémica como centros de reproducción, con el propósito de reintroducción, para que sean los únicos recintos del país donde sea posible reproducir especies exóticas y silvestres.
Texto: Georgina Bacelis
Fotos: Cortesía
