Exporta Yucatán más de 290 mil ciudadanos. Quintana Roo, el destino preferido.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y de la lista nominal del INE, el número de yucatecos que residen en otros estados se ha incrementado durante los últimos 15 años en más del 100%, y actualmente existen casi 300 mil esparcidos en todo el país.

A pesar de que en los últimos años Yucatán es considerado como uno de los destinos preferidos de la migración interestatal debido sobre todo a su tranquilidad, la realidad es que hoy en día, según la lista nominal del Instituto Nacional Electoral (INE), existe más yucatecos esparcidos a lo largo y ancho de la República que fuereños habitando en la “tierra del faisán y del venado”.

Según el último reporte presentado por el INE el pasado 30 marzo, en total existen 291 mil 901 yucatecos regados en las otras 31 entidades. Sin embargo, a pesar de que en todo el país nos podemos encontrar a un “boxito”, la realidad es que en donde se concentra prácticamente la totalidad de los migrantes es en nuestro vecino estado.

Sólo en Quintana Roo viven más de 251 mil yucatecos, lo que representa casi una cuarta parte de la población total de Mérida y supera por mucho a la cantidad de ciudadanos que habitan en cualquiera de los otros 105 municipios que conforman Yucatán.

Basta recordar que según datos de la Encuesta Intercensal del 2015 realizada por el Inegi, en Yucatán habitan 2,095,175 personas, de las cuales 892 mil 363 viven en Mérida, mientras que el segundo municipio con mayor cantidad de habitantes es Kanasín con 96 mil 317.

En total, solo Quintana Roo posee la misma cantidad de Yucatecos que Kanasín, Valladolid y Tizimín juntos, siendo estos los 3 municipios con mayor cantidad de habitantes después de Mérida.

Según esta radiografía el segundo estado con mayor presencia de yucatecos es Campeche, con 16, 859 y el tercer lugar es la Ciudad de México, que alberga 8,156 paisanos.

Sobresale que Baja California encontrándose al otro extremo del país en relación a Yucatán, sea la quinta entidad en tener la mayor cantidad de coterráneos, superando incluso a otros sitios más cercanos como Chiapas o Oaxaca.

Por el contrario, los estados que menos yucatecos tienen son Durango, Nayarit y Zacatecas.

 

¿Por qué a Quintana Roo?

 

Es de resaltar la importancia que tiene la relación entre Yucatán y Quintana Roo, sobre todo a partir del surgimiento de este último como una potencia turística.

Según el documento “La migración indígena interestatal en la península de Yucatán” elaborado por la investigadora del Instituto de Geografía de la UNAM, María Elena Cea Herrera esta migración se da a partir de 1990 poco después del desastre natural ocasionado por el huracán Gilberto.

“El total de migrantes de cinco y más años de edad que se dirigió de Yucatán a Quintana Roo en 1990 fue de 143,832 personas, de las cuales, cerca de la mitad eran hablantes de lenguas indígenas (49.2%). Este segmento indígena de la corriente migratoria mencionada concentra el 15.5% del total de emigrantes indígenas del país y representa el 87.6% de los que expulsa el estado de Yucatán (80,834) y el 91.4% de los 77, 476 inmigrantes indígenas que recibe el estado de Quintana Roo”.

Reporta que las ventajosas condiciones del estado de Quintana Roo conforman una de las principales razones de que esta entidad constituya el polo de desarrollo económico con mayor atracción para los movimientos migratorios de la región peninsular e incluso de los del resto del país, no sólo entre los hablantes de lenguas indígenas, sino de la población en general.

“Es importante destacar el papel del corredor turístico Cancún Tulum, convertido a principios de los setenta en una concentración regional de servicios turísticos para impulsar el desarrollo regional, la creación de empleos y la captación de divisas, tanto que para 1990 la población total de Cancún prácticamente ya se había quintuplicado”.

La mayoría de los yucatecos que se dirigen a Quintana Roo lo hace por necesidades de empleo, que cubren en los servicios de limpieza, mantenimiento, vigilancia, jardinería o servicio doméstico que demanda la cadena hotelera o los centros comerciales.

 

Panorama a nivel

nacional

 

Sin embargo, desde el 2005, Yucatán se ha convertido a nivel nacional en un estado atractivo para el proceso migratorio, tanto así que según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2014 (Enadid), se encuentra ubicado en el quinto lugar como la entidad con la mayor atracción de población por efecto de la migración interna, empatado con el Aguascalientes.

Según este reporte sus indicadores económicos y el ser la entidad más segura del país son las principales causas, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

En el primer lugar de la Enadid, se encuentra el estado de Colima, que tiene un saldo neto migratorio del 4%; después se encuentra Queretaro un 3.6%; Baja California Sur, con 3.1%; Quintana Roo, con 2.7%; Yucatán y Aguascalientes, con 2%, cada uno; e Hidalgo, con 1.7 por ciento.

En caso contrario, las entidades federativas que registraron la mayor expulsión de población por concepto de migración son: la Ciudad de México, con un saldo negativo de 3.1%, el más alto a nivel nacional; luego Tamaulipas, con 3%; Sinaloa, con 1.8%; Guerrero, con 1.7%, y Chihuahua, con 1.4 por ciento.

En total, el Enadid 2014 detectó 20 entidades federativas que tuvieron ganancias de población (atracción, con saldo positivo) por efecto de la migración interna y 11 que presentaron saldos negativos (expulsión), uno de los saltos más importantes lo dio Yucatán, quien pasó de tener una expulsión media de 1985 a 1990, a tener una atracción media de 2005 a 2010.

 

Las probables causas de la migración interna

 

La encuesta indica que las principales causas de la migración interna en el país son la reunión con familiares y aspectos laborales, como la búsqueda o cambio de trabajo.

Otros aspectos que inciden en el movimiento poblacional, en términos generales, son la inseguridad pública o violencia, así como estudiar o contraer matrimonio. De acuerdo con los datos que se presentan en esa publicación, la migración interna pasó de 5.9 millones en el lapso 1995-2000 a 6.4 millones en el periodo 2005-2010, lo que representó una ligera disminución porcentual al pasar de 6.1 a 5.7 por ciento de la población total.

Entre otros datos a destacar, entre 1995-2000 y 2005-2010 cambiaron algunos orígenes y destinos; por ejemplo, disminuyó la capacidad de atracción de varias entidades federativas del norte del país, como Baja California, Chihuahua y Tamaulipas; en cambio, entidades del centro y sur como Yucatán pasaron de ser expulsor a ser receptor.- Roberto Ojeda

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