Afirman que el Gobierno del Estado no cuenta con la capacidad plena para atender la emergencia sanitaria; la plaga representa una grave amenaza para el hato ganadero, con más de 200 casos confirmados hasta el 27 de mayo
La creciente presencia del gusano barrenador en Campeche mantiene en alerta al sector ganadero, especialmente a los pequeños productores, quienes aseguran vivir en la incertidumbre ante una respuesta institucional insuficiente.
Luis Hernández Mora, presidente de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en el Estado, afirmó que el gobierno estatal no cuenta con la capacidad plena para atender la emergencia sanitaria. Señaló que, aunque existe disposición por parte de los productores para colaborar, la falta de infraestructura humana y estrategias claras por parte de las autoridades ha generado preocupación en varias comunidades afectadas.
“Existe inquietud entre los ganaderos. Esperamos que el Gobierno del Estado implemente acciones preventivas y frene la propagación de la plaga en municipios donde ya hay presencia del gusano”, expresó Hernández Mora, quien también lamentó la escasa comunicación por parte del Comité Estatal para el Fomento y Protección Pecuaria (Cofopecam) y del Cesavecam, lo que ha complicado la coordinación en el territorio.
En la misma línea, el diputado federal Emilio Lara Calderón, integrante de la Comisión de Ganadería en el Congreso de la Unión, urgió a las autoridades a actuar de inmediato. Aseguró que la plaga representa una grave amenaza para el campo campechano, con más de 200 casos confirmados hasta el 27 de mayo, y advirtió que ya ha provocado el cierre de fronteras ganaderas, lo cual afecta los ingresos de miles de familias.
“El campo está en pausa, pero la plaga no. No permitiremos que malas decisiones sigan comprometiendo el futuro del sector. Es momento de soluciones reales”, subrayó el legislador priista.
De acuerdo con el último reporte de las autoridades sanitarias, el municipio de Candelaria encabeza la lista de zonas más afectadas, con al menos 65 animales infectados y un caso confirmado en una persona de la tercera edad. Le siguen Carmen y el muncipio de Escárcega, donde también se ha reportado brotes en el hato ganadero.
Precisamente en Escárcega, el alcalde Juan Carlos Hernández Rath reconoció que, si bien se trata de una situación grave, también es controlable, siempre que se informe con oportunidad a las comunidades. “Se ha generado alarma por falta de información precisa. Es importante que comisarios y productores reciban datos claros para tomar medidas preventivas”, declaró.
El edil adelantó que se ha convocado una reunión con autoridades fitosanitarias, representantes del ayuntamiento y productores para este martes, con el fin de revisar el avance de la plaga y su impacto, que incluso ha alcanzado ya a la población humana en casos puntuales.
En tanto, el sector ganadero exige claridad en las estrategias de sanidad y una mayor comunicación con las instituciones encargadas de proteger al campo campechano. Mientras tanto, el gusano barrenador del ganado continúa su avance y los productores enfrentan solos una plaga que amenaza con dejar consecuencias económicas y sociales duraderas.
Texto y fotos: Agencias