Sergio Vadillo Lora, recibió el apoyo incondicional del panismo de Tixcacal en su ruta electoral por la diputación federal del III Distrito para representar los mejores valores de Yucatán.
Más allá de su filiación priista y por inspirar la confianza de que él sí cumplirá con los rezagos que otros dejaron pendientes, recibió el respaldo de la gente.
La lideresa del blanquiazul, María Griselda Can Martín, externó su beneplácito por el hecho de que Vadillo Lora sea quien encabece la candidatura de la coalición Fuerza y Corazón por México en esta localidad que, dijo, fue olvidada por quienes anteriormente vinieron a pedir el voto y no sólo no cumplieron, sino que jamás regresaron.
De manera concreta y directa, se refirió al aún diputado federal por ese mismo distrito, Rommel Pacheco Marrufo, a quien acusó de incumplirle a ella y a sus representados en la campaña de 2021 en la que representó, precisamente, a Acción Nacional.
“El medallista vino, nos prometió, pero finalmente nos abandonó y jamás regresó a esta comisaría”, deploró la ciudadana.
Tras recibir al aspirante del PRI, PAN Y PRD en su casa, donde organizó un encuentro con ciudadanos de esta localidad, Can Martín, a nombre de los presentes, confió a Vadillo Lora las aspiraciones y necesidades de esa región de Mérida.
Los asistentes se quejaron, entre otras cosas, de la falta de transporte adecuado y suficiente para poder viajar hasta Mérida, pues de hecho, no hay camiones urbanos hacia la ciudad.
“Solo funcionan dos combis que vienen con poca frecuencia y es insuficiente”, se escuchó en forma reiterada.
Asimismo, la propia Can Martín se quejó del camino que conduce de Tixcacal a la localidad de Oxcum, cuya habilitación, recordó, les fue prometida por Pacheco Marrufo.
Al respecto, la activista del blanquiazul se dijo segura de que ello no sucederá con Vadillo Lora, a quien pidió que gestione la demanda “porque él va a ganar” el 2 de junio.
En respuesta Vadillo Lora, garantizó que en cuatro o cinco meses, cuando ya sea legislador federal por ese distrito, iniciará los trámites ante quien corresponda para luego volver y demostrar que “en Tixcacal esos sueños son realidad”.
Texto y foto: Cortesía